Diego Spagnuolo cambió su versión
Diego Spagnuolo, luego de la difusión pública de sus audios denunciando hechos de corrupción en el gobierno de Javier Milei, ofreció dos versiones distintas sobre el origen de las grabaciones que lo tienen como protagonista.
Después, el Gobierno, se enredó en una interna que derivó en dos denuncias donde triunfó el ala de Patricia Bullrich, que complicó aún más el futuro frente judicial para el Ejecutivo y lejos de contener el escándalo, lo magnificó.
La primera versión, según recordó Ambito, que dio Spagnuolo apuntó a Natalia Basil, esposa del consultor en campañas políticas Fernando Cerimedo, quien –al momento de las grabaciones que datan de varios meses atrás- era la encargada de las partidas presupuestarias en Andis. Había sido nombrada en mayo de 2024, pero en diciembre fue, sorpresivamente, catapultada a AYSA.
Fuentes oficiales le confiaron al mismo medio que un probable motivo fueron las irregularidades que había recopilado, entre ellas, el canal preferencial de la Droguería Suizo Argentina de los Kovalivker. Nadie quiere indagar en quién financió el despliegue de fiscales para la segunda vuelta electoral donde triunfó LLA.
Nueva versión.
La versión mutó con el correr de las horas ante otros interlocutores del Gobierno que frenéticamente lo interrogaron. “No es la que dicen. ¿Quién me grabó? No se los voy a decir”.
Ambito pudo confirmar con varios funcionarios que esa fue la respuesta. Fue antes de cortar los teléfonos y el diálogo con los miembros del Ejecutivo que intentaban contener la crisis. Esta segunda versión encendió de furia al núcleo más cercano a Javier Milei.
Hoy reconocen que, si no hubiese habido una reacción visceral, todavía se podría estar discutiendo la veracidad de los audios. Ya nadie pone en duda su autenticidad.
El Gobierno estaba al tanto de que los audios estaban en poder del periodismo días antes. Y también saben que hay más diálogos del ex titular del Andis.
“Era el abogado del presidente”, graficaron quienes tempranamente advirtieron que se avecinaba una crisis política de mayor alcance que el caso $LIBRA.
Santiago Viola intentó ponerle abogados apenas el caso ingresó a tribunales. Volvió con un fracaso. Spagnuolo nombró a Juan Araoz de Lamadrid y a Ignacio Rada Schultze. Fuentes oficiales le aseguraron a Ambito que no logran siquiera tener diálogo para unificar una estrategia cuando el caso empezó a salpicar a Karina Milei, la secretaria general de Presidencia.
Celulares.
La justicia procederá a la apertura del teléfono del ex funcionario de la Andis, Daniel Garbellini que fue echado por el gobierno cuando estalló el escándalo de los audios de Diego Spagnuolo. En los audios, el ex titular del organismo lo apunta cuando dice “me pusieron a un tipo que maneja toda la caja mía”. Garbellini es uno de los involucrados y entregó su teléfono a la justicia.
Fuentes judiciales confirmaron a Ambito que, se abrirá el teléfono de Garbellini, quien fue director de Acceso a los Servicios de Salud de la agencia de Discapacidad hasta que fue desplazado. La apertura la llevará adelante la Datip, que es Dirección General de Investigaciones y Apoyo Tecnológico a la Investigación Penal, que depende del Ministerio Público Fiscal.
Causa.
Desde su cargo en Andis, Garbellini manejaba el programa Incluir Salud, una especie de obra social a la que acceden beneficiarios de pensiones que no tienen otra cobertura. Mientras se conocía el sistema de corrupción, la Andis recortó miles de prestaciones. Al tiempo que dejaba a mucha gente sin asistencia, le quitaron el ingreso a profesionales y asistentes.
En los audios, Garbellini está señalado como la persona que el subsecretario de Gestión Institucional de la Secretaría General de la Presidencia, Eduardo “Lule” Menem, habría colocado en la Andis para hacer operativa la supuesta maniobra de retornos.
“Lule me quiso meter una mina en una dirección nacional, lo frizé. Me quiso meter el de Recursos Humanos, lo frizé. Pero me metió el más importante de todos. Para chorear”, dice la grabación difundida.
El teléfono celular de Garbellini lo analiza la Dirección General de Investigaciones y Apoyo Tecnológico a la Investigación Penal (Datip) que depende del Ministerio Público Fiscal. El jueves se abrirá y se verá si los peritos encuentran llamadas, mensajes y archivos clave para la investigación.
Secreto de sumario.
El juez federal Sebastián Casanello prorrogó por diez días más el secreto de sumario en la causa que investiga supuesto pago de sobornos en la compra de medicamentos en la Agencia Nacional de Discapacidad .
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