Fin al sueño de la ciudadanía italiana
Ya no podrán gestionar la ciudadanía italiana los bisnietos y bisnietas. Los consulados dejaron de recibir solicitudes y tampoco continuarán los trámites que estaban en proceso.
A través de un decreto ley, la presidenta de Italia, Giorgia Meloni, restringió el acceso a la ciudadanía “ius sanguinis” (derecho por sangre) solamente a hijos y nietos de italianos nativos. La medida impacta con fuerza en Argentina, que registra una voluminosa inmigración desde aquella nación europea y donde hasta ahora podían conseguir ciudadanía los descendientes de tercera generación, es decir los bisnietos.
La modificación rige desde el viernes 28 de marzo. A partir de esa fecha, bisnietos y generaciones posteriores ya no podrán obtener ciudadanía italiana, aunque hubieran iniciado esos trámites en los tribunales. El decreto de Meloni dejó sin chances a miles de argentinos que se encontraban en pleno proceso para conseguir el pasaporte italiano, entre ellos centenares de pampeanos y pampeanas. De todos modos, la resolución presidencial debe ser ratificada por el Parlamento en un lapso de 60 días. En caso contrario, la medida perderá su vigencia.
El anuncio fue formulado por el vicepresidente del Consejo de Ministros y actual canciller, Antonio Tajani, quien utilizó las estadísticas oficiales para justificar la esta decisión. Según el funcionario, Argentina pasó de unas 20 mil solicitudes tramitadas en 2023 a 30 mil en 2024, mientras Brasil pasó de casi 15 mil en 2022 a unas 20 mil el año pasado. Otro país sudamericano con fuerte presencia en el listado de trámites es Venezuela, que registró casi 8.000 nuevos ciudadanos italianos en 2023.
Además, los consulados ya no podrán otorgar la ciudadanía, la cual solo podrá obtenerse mediante una trámite directo en una unidad especializada que creará el Ministerio de Relaciones Exteriores, que tendrá un plazo de 48 meses para expedirse. Otro cambio es que para adquirir ciudadanía por matrimonio se exigirá una permanencia estable de dos años en Italia. Hasta ahora, solo se requería que los cónyuges aprobaran un examen de idioma italiano.
“Muchos abusos”.
Tajani argumentó que la cifra de pedidos alarmó a Giorgia Meloni, quien considera perjudicial que la ciudadanía italiana pueda tramitarse tan fácilmente, sin que sus aspirantes tengan “un lazo real” con su país. “La concesión de ciudadanía es un asunto serio. Lamentablemente, durante muchos años abundaron los abusos y solicitudes que van más allá del verdadero interés por nuestro país”, explicó.
Además de los números, el funcionario denunció que existe una “proliferación de agencias que gestionan ciudadanías como si fueran paquetes turísticos. Es un escándalo y hay cientos de ejemplos. Incluso existe un Black November y hasta cursos de formación para construir una ciudadanía italiana. Esto no significa convertirse en ciudadanos italianos, sino acceder a un medio que les permite obtener un pasaporte europeo y viajar por el mundo”, lamentó.
La Pampa.
La medida provocará un fuerte impacto en muchas familias argentinas y La Pampa no será una excepción. Hace un año, en mayo de 2024, el titular del Consulado General de Italia en Bahía Blanca, Nicola Bazzani, visitó la provincia y entre otros anuncios confirmó la posibilidad de “gestionar los pasaportes italianos en Santa Rosa, sin necesidad de viajar a Bahía Blanca”.
El diplomático advirtió entonces que esta nueva herramienta respondía “al crecimiento de solicitudes de ciudadanía, que supera la capacidad de nuestra sede en Bahía Blanca, donde estábamos otorgando 40 turnos por mes” y recordó que “La Pampa tiene la población italiana más antigua de esta circunscripción consular”. Actualmente, hay unos 10 mil pampeanos que cuentan con esa doble ciudadanía.
Suspenden.
Si bien las personas que ya obtuvieron la ciudadanía no la perderán, quienes todavía no iniciaron el trámite ya no podrán hacerlo y aquellos que presentaron su solicitud en tribunales, podrían continuar con la ley anterior, pero sin garantías de éxito. Tajani estimó que “hay más ciudadanos italianos fuera de Europa que adentro. Por eso, esta reforma apunta a proteger a quienes realmente quieren ser ciudadanos italianos”.
El funcionario explicó que la nueva normativa “establece que los descendientes de italianos nacidos en el extranjero serán ciudadanos italianos automáticamente, pero solo por dos generaciones y tras demostrar su vínculo. Quien tenga un progenitor o abuelo nacido en Italia, será ciudadano desde su nacimiento”, dijo.
La modificación fue comunicada el 29 de marzo a los consulados, que inmediatamente suspendieron el servicio de ciudadanía, frenaron las solicitudes en trámite y dejaron de recibir presentaciones y de transcribir partidas de nacimiento. Ante una consulta de LA ARENA, desde el Consulado General de Bahía Blanca respondieron que se conocerán mayores detalles en los próximos días.
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