"La Justicia, un engranaje más en este juego de poderosos"

El director del Enacom, Alejandro Gigena, opinó sobre el fallo que anuló el Decreto de Necesidad y Urgencia (DNU) que había declarado como servicio público esencial y estratégico a las telecomunicaciones. Consideró que los argumentos son "disparatados" y afirmó que "la Justicia es un engranaje más en este juego de poderosos". 

El pampeano recordó que el DNU fue dictado en agosto de 2020, durante la pandemia, y allí se declaraba "servicio público esencial y estratégico" a la televisión por cable, internet y la telefonía móvil en todas sus modalidades. A los pocos días, indicó, "Telecom y Telefónica interponen la inconstitucionalidad de ese decreto y logran que se suspendan los efectos". 

Sin embargo, lo que sucedió días atrás es que se dictó "la primera sentencia sobre el fondo de la cuestión. No es una medida cautelar que precautariamente decide algo, sino que da los argumentos de fondo que declara la inconstitucionalidad de la norma". 

En esa línea, reveló que desde Enacom ya "hemos interpuesto las apelaciones" y remarcó que es una sentencia "de primera instancia. No hay nada firme, porque el recurso de apelación suspende estos efectos".

"Argumentos disparatados".

Gigena consideró que "esta sentencia lo que hace es empezar a instalar en este nuevo gobierno la idea de que la ley tiene vicios de constitucionalidad.
Va a pasar lo mismo que pasó con la Ley de Medios. Se generó un ambiente en la sociedad de que la ley está cuestionada constitucionalmente y va a terminar el Poder Ejecutivo dictando una nueva norma o estableciendo un nuevo régimen".

A su vez, el director afirmó que los argumentos del fallo "son realmente disparatados". A modo de ejemplo, comentó que la sentencia señala que los DNU "no puede dictarse por telecomunicaciones, cuando es la Constitución la que dice que solo no se pueden dictar por cuestiones penales o tributarias". 

Otro aspecto que indica el fallo es que no fue ratificado por el Congreso de la Nación. "La propia Cámara estableció un reglamento para el procedimiento por el cual se ratifican los DNU y fue cumplido a rajatabla", sostuvo Gigena.

"Por otro lado, habla de que se viola el derecho de propiedad, cuando en realidad las telecomunicaciones están dadas en base al espectro radioeléctrico, que es un bien público natural que el Estado no vendió, sino que lo concesionó. En el marco de eso se regula", añadió.

"Me da la sensación es que se comienza a instalar esta idea de que la ley que declara servicio público y le da estas facultades al Estado de regular tiene algún vicio de legalidad. La Justicia es un engranaje más en este juego de los poderosos, cuando hay una norma que les molesta, generar las situaciones para que sea modificada o en principio no se aplique", concluyó.