Dos nuevos asesinatos y ya son cinco en 15 días
(General Pico/Agencia)
Un hombre identificado como Julio Gualpa (27) falleció de un disparo ayer a la mañana en General Pico, a la salida de un boliche ubicado en la calle 10. Otro hombre, José Sombra (45), fue herido a la altura del hombro. Hasta anoche no había detenidos.
El vecino Julio Gualpa de 27 años resultó muerto y Jorge Sombra (45) herido, como saldo de una balacera a las afueras del pub Zeus, en calle 10 entre 113 y 115 de esta ciudad. El jefe de la Unidad Regional ll, comisario mayor Carlos Chico, afirmó que las víctimas fueron alcanzadas por disparos efectuados por un hombre con un arma calibre 32. No descartan que se trate de un "ajuste de cuentas".
El incidente ocurrió cerca de las 8. Julio Gualpa que había estado unos momentos dentro del pub, fue sorprendido por su agresor al retirarse del bar en momentos en que se dirigía a su auto. El atacante esperó junto a un cómplice en las afueras del pub a que su víctima saliera para efectuar los disparos.
Gualpa fue alcanzado por un disparo de arma de fuego en su abdomen y cayó herido junto a su vehículo. Desde allí fue retirado por el Servicio de Emergencias con algunos signos vitales, pero falleció antes de ingresar a la guardia de urgencias del Hospital Centeno.
Ataque artero.
Si bien no están claras las circunstancias que rodean al hecho, testigos relataron que Julio Gualpa se retiró del pub Zeus junto a Jorge Sombra luego de haber permanecido algunos minutos en el lugar.
Dentro del local, los amigos no participaron de ningún incidente que hiciera sospechar el trágico desenlace. Gualpa se retiró junto a Sombra hacia los autos, un Chevrolet Astra blanco y un Volkswagen Gol negro, que habían dejado estacionados a 20 metros de la puerta de ingreso al pub.
Al llegar al vehículo de Gualpa, los hombres son sorprendidos por un atacante que descerraja un disparo mortal a quemarropa sobre la humanidad de la víctima. El tirador luego disparó contra Jorge Sombra. Este resultó alcanzado por un balazo que impactó en su hombro, herida que no puso en riesgo su vida, pero que obligó a una intervención quirúrgica en el centro hospitalario. Sombra se reponía en una de las salas del hospital local y allí prestó declaración. Su versión de los hechos no aportó demasiado a los investigadores.
De acuerdo a una serie de versiones recogidas en el lugar, se puede reconstruir que el agresor esperó en una moto junto a un cómplice a que su víctima saliera del pub. El tirador y el cómplice permanecieron en la esquina de calle 10 y 113, en proximidades al auto de Gualpa, el Chevrolet Astra -patente FAG 794- blanco.
Cuando el agresor observó que Gualpa se acercó al vehículo, lo abordó y le disparó contra su abdomen sin darle ninguna posibilidad de defensa. La víctima cayó herida junto al auto y desde allí fue retirada por el personal del servicio de emergencias que acudió a asistir a los lesionados.
Disparo a Sombra.
La versión más consistente que maneja la policía indica que Sombra era un acompañante casual de Gualpa y que resultó herido en el mismo atentado por estar en el lugar menos indicado. El auto de Sombra, un Volkswagen Gol -patente GGW 528- negro, estaba estacionado justo detrás del Astra de Gualpa.
Las fuentes policiales consultadas no vinculan a Sombra con Gualpa y afirman que una de las hipótesis es un "ajuste de cuentas" por las supuestas actividades ilegales que llevaba adelante la víctima fatal.
El autor de los disparos se retiró del lugar en moto. Su cómplice esperó con el vehículo en marcha a pocos metros del lugar del ataque a que se concretara la agresión, y cumplido el cometido, huyeron raudamente del lugar.
Búsqueda.
Personal de Criminalística, liderados por el comisario Zarrans, inspeccionó la escena del crimen, revisó los autos de Gualpa y Sombra, que permanecieron estacionados juntos.
Los investigadores hallaron debajo del auto del muerto un plomo servido del arma agresora y luego de realizar una exhaustiva revisión de los vehículos dentro de los habitáculos y los baúles, no encontraron ningún elemento relevante. De todos modos se dispuso el secuestro preventivo de ambas unidades.
El fiscal Alejandro Gilardenghi investiga la causa caratulada "homicidio" y "lesiones graves", y lidera la búsqueda del autor de los disparos y de su cómplice.
Disturbios en el hospital.
Ayer y como consecuencia del fallecimiento de Julio Gualpa, en la guardia de urgencias del Hospital Centeno, familiares y amigos de la víctima provocaron disturbios que incluyeron la rotura de algunos vidrios y agresiones al personal hospitalario. La intervención policial frenó los desmanes, pero no se produjeron detenciones.
Julio Gualpa fue jugador de fútbol en la Liga Pampeana. Purgaba una suspensión por diez años por agresión a un árbitro al término del partido que su equipo, Unión Deportiva Vértiz disputó con Ferro de Alvear. En agosto de 2009 el Tribunal de Disciplina de la Liga Pampeana le aplicó la más dura sanción: diez años de suspensión por lesionar al árbitro Ceferino Arias. Gualpa estaba en libertad desde el pasado 22 de agosto, luego de cumplir una condena por lesiones, robo y violencia de género. A mediados del año pasado fue imputado del robo en el geriátrico de la médica Estela Otria, de donde se habría llevado 90 mil pesos, 15 mil dólares y 500 euros.
Zeus.
El ahora bar Zeus tiene fijado como horario de apertura las 8, pero ayer estaba abierto desde las 6. Ante la sucesión de inconvenientes dentro y a la salida del local, el Juzgado de Faltas municipal ordenó a la policía destacar una consigna adicional en la puerta del sitio, con cargo al titular. Esa consigna adicional dejó de prestarse debido a la falta de pago del dueño. El comisario Chico dijo que los adicionales "como no los pagan, no se prestan". Desde la policía cuestionan al municipio y al Concejo por la falta de controles y clausuras del local.
Asesinan a un hombre en Intendente Alvear.
Un joven que desde hace años reside en Intendente Alvear murió en la madrugada de ayer tras sufrir una certera puñalada en el pecho mientras se desarrollaba un encuentro bailable en la zona urbana de esta localidad. El agresor es Esteban Alberto "Betún" Durán (33 años), quien fue detenido por la policía dos horas después del hecho y luego trasladado a la Alcaidía de General Pico.
La víctima fatal fue identificada por la policía como Luis Marcelo Giménez (31 años), jornalero y padre de dos niñas de 6 y 8 años de edad. De acuerdo a fuentes uniformadas, el sangriento episodio ocurrió cerca de las 2.15 en un galpón situado sobre Avenida Avellaneda y calle Saavedra que funciona como bailanta "Los Amigos", propiedad de Facundo Alanís.
En el interior del sitio, se habría producido un cambio de palabras entre dos asistentes a la fiesta y Giménez se acercó para mediar en la discusión. Siempre teniendo en cuenta la versión de testigos, Esteban Durán también se encontraba cercano al tumulto y sin mediar palabra, le asestó a Giménez una puñalada a la altura de la tetilla izquierda con un arma blanca de mediano porte.
Giménez caminó unos metros hacia el exterior del local, donde cayó y dejó una gran cantidad de sangre. Varios de sus familiares que se encontraban con él, trataron de asistirlo, llamaron al centro de asistencia público pero como la ambulancia se demoraba en su llegada (aparentemente no hay suficientes choferes para cumplir todos los turnos y fue una sonora queja de la familia de la víctima), fue cargado en la parte trasera de una camioneta de la policía.
A los pocos minutos del ingreso al hospital, fue atendido inmediatamente por los facultativos, pero el joven falleció por la gravedad de las heridas. Se cree que se vieron afectadas arterias cercanas al corazón y que le produjeron un rápido deceso.
A todo esto, el victimario, luego de herir de muerte a Giménez, saltó un tapial y huyó del lugar aprovechando el estupor que causó su acción. Dos horas después, sobre calle Hernández y a unos 200 metros del lugar del asesinato, fue individualizado y detenido por los efectivos.
Dos demorados.
En tanto, las dos personas mayores que acompañaban al autor de la apuñalada -un hermano identificado como José Durán y Cristian Rodríguez Oliveira- fueron demorados y alojados en la comisaría local.
En el lugar del hecho estuvo presente personal de Criminalística de General Pico que, entre otras diligencias, recuperó el arma utilizada para cometer el asesinato. Las actuaciones fueron giradas al fiscal piquense Alejandro Gilardenghi.
Cinco homicidios en los últimos 16 días.
La tasa de homicidios en el territorio provincial creció más del 30 por ciento en las últimas dos semanas. De 11 homicidios que había hasta el 3 de octubre, se pasó a 16 asesinatos al día de ayer. Cuando aún no terminó el año, la estadística de 2013 supera a la de los últimos cuatro: En 2011 y 2012, la cifra ascendió a 12 asesinatos, mientras que en el 2010 el número llegó a 9 casos. El miércoles pasado, el ministro de Gobierno Justicia y Seguridad, César Rodríguez dijo que "los homicidios son producto de una sociedad muy violenta".
Según informó un alto de jefe de la Policía de La Pampa, "de los cinco homicidios ocurridos en octubre, cuatro fueron esclarecidos". El viernes 4 de octubre a las 0.50 Ramón Santana (52) fue apuñalado por un amigo en Zona Norte cuando regresaba de jugar a las bochas. Murió horas después en el hospital.
Flora Ramborger fue encontrada sin vida el sábado 11 en su vivienda. La habían matado el día anterior con un calador de cereales. En este caso el crimen fue acompañado de un robo. Hay tres hermanos detenidos por el crimen.
Alexis Rodríguez, un niño de 12 años, murió luego de que su propio primo le disparara presuntamente por accidente mientras manipulaba una escopeta. Ocurrió el sábado 11 en la localidad de La Maruja.
Luis Marcelo Giménez (31) murió ayer tras ser apuñalado en un baile en Intendente Alvear. El agresor, que permanece detenido, es Esteban Alberto "Betún" Durán.
Julio Gualpa (27) murió ayer camino al Hospital Centeno -General Pico- luego de ser baleado afuera del pub Zeus. La policía investiga quién fue el autor del hecho.
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