Miércoles 02 de julio 2025

Tsipras sube la apuesta

Redacción 03/07/2015 - 04.06.hs

En la recta final de una campaña cada vez más tensa, el gobierno griego de Alexis Tsipras subió ayer la apuesta y dio a entender que renunciará en caso de que el 'sí' gane el referéndum del próximo domingo, al mismo tiempo que sumó al Fondo Monetario Internacional (FMI) como un aliado inesperado.
Tsipras volvió a defender ayer en una entrevista con la televisión local la convocatoria a un referéndum, destacó que si gana el 'sí' al ajuste propuesto por los acreedores, él pondrá en marcha "los procedimientos previstos por la Constitución" y aclaró que su "silla" no está por encima de los intereses de la nación.

 

Informe.
Apenas dos días después de que Atenas entrara en mora con el Fondo, el organismo de crédito publicó un informe realizado antes de la ruptura de las negociaciones, en el que advirtió que Grecia necesita una reestructuración de su deuda externa y 50.000 millones de euros extras sólo en los próximos tres años.
La conclusión del FMI no sólo contradice la postura de Alemania y el Eurogrupo, que sostienen que la deuda externa griega es sostenible por lo que no están dispuestos a discutir un recorte o una reestructuración, sino que además ratifica los reclamos presentados por Tsipras en la mesa de negociación en Bruselas.
"Cuando anunciamos el referéndum, el FMI anunció que la deuda Grecia necesitaba una quita del 30% y contar con un período de gracia a largo plazo", sostuvo ayer el primer ministro griego y líder del partido izquierdista Syriza en una entrevista con la televisión local, reproducida en Twitter.
Su vocero, Gavriil Sakelaridis, fue aún más claro y aseguró a la prensa que "el informe del FMI da completamente la razón al gobierno griego respecto a la no sostenibilidad de la deuda", según reprodujo la agencia de noticias EFE.

 

Jack Lew.
Hasta el secretario del Tesoro norteamericano, Jack Lew, había pedido la semana pasada a Alemania y al resto del Eurogrupo que analizaran la posibilidad de reestructurar la deuda griega, que actualmente supera el 180% del PBI heleno.

 

UE.
Lejos de escuchar estas recomendaciones, los máximos líderes de la Unión Europea (UE) mantuvieron ayer su posición de no discutir ni negociar nada hasta que se conozca el referéndum convocado por Tsipras para decidir sobre los últimos ajustes y reformas propuestos por las instituciones acreedoras.
También mantuvieron su guerra verbal contra Tsipras y el gobierno griego. "Nuevas elecciones serían necesarias si el pueblo griego vota a favor de un programa de reformas y, por ende, de quedarse en la euro zona; y si Tsipras, también en consecuencia, renuncia", pronosticó el presidente del Parlamento Europeo, el alemán Martin Schulz, según publicó el diario comercial de ese país, Handelsblatt.
Según el funcionario europeo, ni bien Tsipras renuncie podría asumir "un gobierno tecnócrata, para que nosotros podamos continuar negociando". "Si este gobierno de transición llega a un acuerdo razonable con los acreedores, entonces el tiempo de Syriza habrá terminado", concluyó Schulz.

 

Hollande.
Incluso el mandatario francés, Francois Hollande, el único presidente europeo que llamó a volver a la mesa de negociación para evitar el referéndum, advirtió ayer en declaraciones a la prensa durante una gira africana que "las consecuencias no serán la misma si gana el 'sí' o el 'no'".
El domingo pasado, tras el fracaso de las negociaciones con sus acreedores y sin una nueva inyección de euros por parte de Bruselas, Tsipras se vio obligado a imponer un corralito bancario y a cerrar los bancos y la Bolsa para evitar una nueva corrida que provoque un derrumbe del sistema financiero del país. (Télam)

 


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