El sabor del encuentro

Gustavo Velozo y Santiago Carro Kehler pusieron en marcha otra veta de su espíritu emprendedor y abrieron un lugar ideal para disfrutar de un buen trago de autor y distintas opciones gastronómicas.
“Este es un sueño que cuando lo empezamos a pensar parecía una locura, fue todo muy rápido pero acá estamos, creemos que es una alternativa que Santa Rosa no tenía y que ahora Kyomu viene a ocupar. Ojalá lo disfruten mucho”, dijo Gustavo Velozo Viceconte al improvisar un discurso en la noche que todo emprendedor imagina cuando se abren las puertas y todo lo trabajado anteriormente se confirma: el lugar es hermoso, lo que se ofrece es de calidad y los y las invitadas disfrutan.

Porque de eso se trata Kyomu, un bar que desde hace unos días tuvo su noche de apertura en la avenida Spinetto 660 de Santa Rosa, un emprendimiento de Gustavo junto a su socio Santiago Carro Kehler que, gracias al éxito del restaurante que también comparten (Ramé), se animaron a ofrecer dentro del mundo gastronómico de la ciudad.
“Kyomu básicamente es un bar de coctelería, ofrecemos una carta súper amplia de manos de expertos y creemos que es algo que no había. Por supuesto que la cocina también tiene su lugar y el espacio es ideal porque tenemos mesas adentro, con una decoración preciosa, y la alternativa irresistible del patio para estas noches de verano”, cuentan los socios sobre un edificio en el que hasta hace un tiempo funcionaba el restaurante Hardy Bistró.

El nuevo bar abre de lunes a lunes a partir de las 20. Mesas para dos o para grupos, sillones, butacas, banquetas y todo lo necesario para el relax y el disfrute. En Kyomu todo está pensado y diseñado para que al traspasar la puerta todo se vuelva una experiencia para los sentidos.

“Con Santiago pensamos armar buenos grupos de trabajo, que puedan tener su propia dinámica y todo funcione de manera armoniosa. En principio voy a estar más en Kyomu y Santiago en Ramé que es nuestro lugar, que nos da todo, pero después la idea es estar los dos en el restaurante y que el bar tenga su propio camino. A Ramé le debemos todo, mucha de esa clientela que tan bien nos responde, nuestros amigos y por supuesto nuestras familias son el sostén de todo esto. El momento es muy complicado, no voy a descubrir nada con esto porque lo vivimos todos los días, pero hay que animarse y nosotros tuvimos esa decisión”, contó Velozo.

Gastronómicos.

Los dos socios trabajan en el mundo gastronómico desde hace bastante tiempo. Y hace más de cinco años coincidieron en lo laboral en “María Castaña”, en Toay, y después en el hotel UNIT santarroseño, que es donde siguen trabajando por la mañana ya que tienen a cargo al área de cocina del lugar.
“En mi caso empecé a los 16 años, estudié la carrera gastronómica y fui pasando por un montón de lugares haciendo apertura de cocina. Tuve mi propio local y desde 2018 estoy en el hotel UNIT. Con Gustavo ya veníamos hablando hace tiempo de hacer algo juntos y justo salió una charla con el dueño anterior de Ramé. Hicimos varios encuentros y casi sin darnos cuenta en agosto de 2022 ya estábamos en el restaurante”, recordó Santiago.

“El crecimiento de Ramé fue algo increíble, los fines de semana está a tope y en la semana se trabaja muy bien. Además este año organizamos eventos por fuera del espacio del restó, eventos de fin de año con muchísima gente, y nos fue bárbaro así que eso también nos ayudó para darnos el impulso de abrir Kyomu”, agregó Gustavo sobre un espacio que está dispuesto con un diseño, buen gusto y calidez y que no se puede hacer otra cosa que disfrutar.