Anegamientos y fuerte aumento del nivel del lago Casa de Piedra

La crecida del río Colorado ayer trajo problemas. En Colonia Catriel (Río Negro) hubo algunos evacuados y en 25 de Mayo se inundaron plantas de captación del sistema de agua potable que debieron ser desconectadas. En El Sauzal, el agua estuvo a diez metros de la ruta nacional 151. Por su parte, en Casa de Piedra la cota subió 38 centímetros.

 

El martes fue el primer día donde la crecida del Colorado, producida por una copiosa lluvia (más de 300 milímetros) caída desde el jueves pasado, se notó en la cuenca media que componen Colonia Catriel, 25 de Mayo y Casa de Piedra. Hubo un importante aumento de la escorrentía, calculada en 600 metros cúbicos por segundo, que en la jornada no había ocasionado problemas.

 

Sin embargo, sobre la medianoche, el medio “Catriel25Noticias” informó que el municipio de Catriel, Defensa Civil, DPA y Bomberos tuvieron que trabajar con máquinas para evitar que el agua ingrese a las viviendas del Lote 14, uno de los barrios más cercanos a la costa del Colorado. Y que, al menos, tres familias fueron evacuadas.

 

En 25 de Mayo.

 

El martes, el Ente Provincial del Río Colorado (EPRC) reveló que la empresa Ribeiro, Cantera Pincheira y la Municipalidad de 25 de Mayo habían realizado un trabajo conjunto en las tareas de defensa ante el aumento del caudal del río Colorado. Puntualmente hicieron movimientos de suelo con maquinaria y camiones para tratar de proteger las plantas de toma del sistema del servicio de agua potable.

 

Sin embargo, ayer, la ola de la crecida sorprendió con un pico -creen que por el Puente Dique bajaban unos 700 metros cúbicos por segundo, lo que produjo varios inconvenientes. Uno, el más importante, fue que la masa líquida superó esas barreras y tres plantas de captación de agua que alimentan el servicio de agua potable a la ciudad quedaron anegadas.

 

Poco después del mediodía, la Secretaría municipal de Obras Públicas hizo el anuncio. "La creciente ha impactado en las captaciones 1, 2 y 3 ubicadas a la vera del río. Y siguiendo el protocolo de seguridad se desconectó el suministro eléctrico de las bombas", explicaron.

 

Asimismo advirtieron que esta contingencia "provocará una merma, por tiempo indeterminado, en el abastecimiento de agua en la localidad". Y reclamaron "administrar eficientemente el consumo".

 

En tanto, el medio Radio Génesis registró gráficamente una situación preocupante: la amenaza del Colorado a la ruta nacional 151 que había inundado el camping municipal y estaba a solo 10 metros de la cinta asfáltica. La situación se dio en el camping municipal de Colonia El Sauzal ubicada entre el Cruce del Desierto y el Puente Dique.

 

Casa de Piedra.

 

Las consecuencias del fenómeno meteorológico que causó la crecida en Casa de Piedra son favorables. Es que el escuálido lago está recibiendo un caudal hídrico tan inesperado como bienvenido.

 

Las precipitaciones mencionadas bajaron por los ríos Barrancas y Grande, y también por cañadones, y alimentaron al Colorado. Tal fue el impacto que de los habituales 45 metros cúbicos por segundo, medidos en la estación de Buta Ranquil en esos días, pasara a las 9 del domingo a 775. Ese caudal fue bajando paulatinamente, en tanto la masa hídrica escurría de la cuenca alta a la media, ésta ultima entre 25 de Mayo y Casa de Piedra. En tanto, ayer a las 15 la escorrentía había descendido a 196 metros cúbicos por segundo.

 

En el caso de la estación de medición en el dique Casa de Piedra, esta crecida significa la recuperación del reservorio. En los últimos días, datos del Coirco confirmaron que la cota del dique pasó de los 271,58 metros sobre el nivel del mar, medidos el domingo, a 271,68 del día lunes, mientras que el martes se registraron 271,79. En tanto ayer, con el nuevo ingreso llevó a la cota a 271,96. Eso significa que subió otros 17 centímetros y acumula un aumento de 38 centímetros en tres días.

 

Las expectativas en la villa turística son enormes, porque saben que el grueso de la ola de crecida aún no llegó. Desean fervientemente que haya una significativa mejora que permita, en parte, la deseada recuperación del reservorio.

 

"Estamos ilusionados".

 

Uno de los vecinos más esperanzados es el buzo Claudio Ramírez, conocido por ser el motivador de la cava acuática, que usó las redes para expresarse y resumir el sentir lugareño. "Estamos ilusionados de que se produzca un milagro. Hace años que esperamos el agua como fuente vital para el desarrollo y el bienestar de la villa", se esperanzó.

 

"Le pido a Dios que cuide a cada paisano a la vera del Colorado aguas arriba, que todo sea paulatino, que podamos vivir una crezca controlada. Acá la represa se las va aguantar y se llenará el lago", concluyó.