Tiene parálisis y Nación le cortó la pensión de toda su vida

La ferocidad de la gestión libertaria parece no tener límites ni fin. Sobre todo con los sectores más desprotegidos que antes contaban con un Estado presente que los contenía. 

A la historia de Daniela Oberts, la joven de 34 años, con síndrome de Down, que le quitaron su pensión, se suma otra nueva situación de absoluta desprotección social.

Belén Aguirre nació hace 39 años en la localidad de Macachín con una parálisis cerebral hepática y toda su vida estuvo en silla de ruedas. 

"Desde que nací cobré la pensión por discapacidad: antes de los 18 años iba mi mamá a cobrarla y después empecé a ir yo", cuenta Belén a LA ARENA desde el pasaje Cardone, casa 166, esquina Pedro Salvi del barrio Aeropuerto 2 de Santa Rosa. 

La joven relata que siempre vivió en silla de ruedas aunque pese a esta condición pudo arreglársela por su cuenta para trabajar y lograr independencia económica.

"Nací en Macachín y tengo mi casa propia allá en el pueblo pero ahora, de manera momentánea, desde hace unos nueve meses, me vine a vivir a Santa Rosa", aclara. 

Belén, junto a Omar, su esposo, pasa estos días en Santa Rosa ya que no tiene silla de ruedas. 

"La nueva silla de ruedas que necesito ya está tramitada por lo que la estoy esperando acá en Santa Rosa", sostiene. 

 Aguirre afirma que tenía una silla de ruedas pero se le quemó el motor por lo que tuvo que iniciar el trámite respectivo para poder obtener una nueva. 

"Va a llegar porque está tramitada pero ahora tengo que esperar", sostiene al indicar que ahora está en una silla con las piernas al aire.

Pensión.

Belén cobraba desde toda su vida una pensión por discapacidad: el monto actual era de 125 mil pesos. 

"Yo se que no es mucho pero era una pensión que me ayudaba con todos los gastos que tenía", indica al recordar que el monto aumentó con el correr de los años. 

"La verdad es que con la pensión no me alcanza pero siempre fue una gran ayuda", reconoce. 

Belén recuerda ayer como uno de los peores días de su vida. Jamás se imaginó que el Estado, que siempre estuvo presente para ella, acompañándola en su día a día, y en todo momento, con una ayuda económica, le iba a cerrar las puertas. 

"Ayer fui a cobrar al Banco de La Pampa, la pensión me aparecía en el recibo pero no en la caja", rememora. 

Pero esto no terminaría acá. 

La joven, preocupada por esta situación, se dirigió horas después a la sede local de Anses. 

"Cuando fui a la Anses, me dijeron que me habían cortado la pensión, así nomás, de manera directa", dice. 

-¿Qué argumento te dieron?

-Que me la cortaban por cuestiones políticas. 

Boletas. 

Aguirre sostiene que el corte de la pensión le complica mucho las cosas. 

Con la voz entrecortada por el dolor, Belén afirma que con el dinero de la pensión pagaba las boletas de luz y de gas entre otros servicios básicos para poder vivir. 

"Cómo voy hacer ahora para pagar las cuentas de la luz o del gas de mi casa en Macachín", se pregunta.

"Tengo todo tipo de gastos que pagar, como las tarjetas, como cualquier persona normal", puntualiza. 

Belén afirma que en la actualidad trabaja de lo que puede. 

"Por estos momentos vendo productos de la marca Avon y hago lo que puedo como puedo pero la verdad es que la situación está muy difícil", indica.

La joven, por último, le pidió a la comunidad que la ayuden en lo que puede sobre todo a Omar, su marido, con quien convive y quien es su principal sostén de vida. "Si quieren ayudarme o a mi marido podrían venir directamente a mi casa", sostiene. 

Motosierra sin piedad. 

La historia de Belén se suma a la de Daniela, la joven, con síndrome de Down, que ya no cuenta con la pensión nacional: un beneficio que le fue otorgado en 1994 y respetado por todos los gobiernos desde entonces como sucede con miles de casos de todo el país. 

Sin embargo, llegó la gestión ultraliberal de La Libertad Avanza y la Casa Rosada arrasó con ese pago, según lo denunció su familia en una emotiva entrevista que salió publicada en las páginas de LA ARENA. 

"Nos dimos cuenta que el pago no llegaba, que pasaban los días, y que algo pasaba. Fuimos a la Anses pero ahí están todos enojados por los despidos y recortes que sufren. Nos dijeron que vayamos al PAMI que ahora maneja la gente de Milei porque de ahí vino la decisión. Seguramente esto va a seguir en los próximos meses, en el caso de Daniela, ella tiene síndrome de Down, no es algo que se pueda curar o modificar. En 30 años no se había cortado nunca el pago de la pensión", lamentó José Luis Oberts, papá de Daniela.