"El libro fue nuestro y ahora es de la comunidad"

"Los rostros de la tierra. Transposiciones", la muestra de arte multidisciplinaria inspirada en el libro "Los rostros de la tierra. Iconografía indígena de La Pampa, 1870-1950", de José Depetris y Pedro Vigne, culminó ayer en el Centro Cultural Provincial Medasur con un panel de artistas y música en vivo.

 

La exhibición, que estaba desde el pasado 19 de noviembre en el Espacio de Artes "Eduardo Di Nardo", tuvo su ceremonia de clausura anoche a las 20 horas, con un importante marco de público. El panel de cierre estuvo encabezado por los autores del libro, y el escritor y coordinador de la muestra, Sergio De Matteo.

 

También estuvieron presentes algunos de los artistas que exhibieron sus trabajos en la muestra: Carlos Giusti (Buenos Aires); Gabriel Vázquez (Río Negro); Miguel García (Toay); Luis Abraham y Rosa Audisio (General Pico); y el dúo de ceramistas Tierra Ranquel, integrado por los artesanos Juan Pérez y Natalia Martínez. La velada también tuvo música en vivo, a cargo de los músicos Luis Gesualdi, Juani De Pian, Pablo Ardovino y Federico Camiletti.

 

La exhibición reunió las obras de diferentes artistas que expusieron fotografías, obras plásticas, canciones y poemas basadas en los rostros del libro, y un muestrario de fotografías, documentos, libros y objetos referidos al trabajo de investigación sobre los pueblos originarios de La Pampa.

 

Depetris.

 

Previo a la clausura de la exhibición, Depetris dialogó con periodistas de Radio Noticias. Expresó su "total agradecimiento por la disposición de un espacio tan emblemático como es el Medasur".

 

A su vez destacó el impacto que ha tenido el libro, que ya va por su segunda edición. "Nuestro concepto como autores es que el libro alguna vez fue nuestro pero ahora ya no lo es tanto, porque ahora es de la comunidad, que pasó a apropiarse de este trabajo", sostuvo.

 

"Los rostros de la tierra" fue reeditado en 2021 por Ediciones Amerindia, 21 años después de su primer tiraje en diciembre del 2000. La primera edición "se agotó muy rápidamente y siempre fue pedido por la gente; finalmente se pudo hacer la segunda edición", recordó Depetris.

 

La muestra, dijo el autor, también tuvo el objetivo de "rescatar los 25 años de vigencia de este proyecto, que empezamos a pergeñar allá por el 98, cuando todavía estaba vigente esto de que era el fin de la historia, que las ideologías no importaban mucho, toda la herencia de vaciamiento cultural que pretendió el menemismo y lo que lo siguieron".