Sabado 10 de mayo 2025

La cosecha de trigo crecerá un 28%

La Bolsa de Comercio de Rosario estima en 700 mil toneladas la cosecha de trigo de la campaña actual, lo que marca un crecimiento de 136.830 toneladas, es decir un 28% por sobre las 563.170 de la anterior campaña.

 

JUAN JOSÉ REYES

 

Según la Bolsa de Comercio de Rosario (BCR) en La Pampa, después de la recolección de los últimos lotes durante diciembre la cosecha de trigo 2024/25 se la estima en 700 mil ton. Un crecimiento de 136.830 ton. (28%) por sobre las 563.170 de la anterior campaña. Es más, la propia Secretaría de Agricultura adelanta en su último reporte del mes de enero que la siembra se dio en 286.000 ha (150.000 agencia Santa Rosa y 136.400 en General Pico).

 

Si bien fue pobre el nivel de lluvias, menores a promedios históricos, las precipitaciones de la última ventana del mes de noviembre y diciembre hizo que el desarrollo del cultivo fuera apto por la mejora de los perfiles de humedad. Con rinde promedio de 2.405 kg/ha y máximos entre 28 y 30 quintales por ha. inclusive en 272 mil hectáreas sembradas. Los mejores registros se dieron, como es costumbre, en los departamentos Guatraché y Atreucó con 180 y 140 mil toneladas respectivamente.

 

Estos datos se reafirman pues la propia Secretaría de Agricultura de la Nación dio cuenta que “la ausencia de lluvias y las elevadas temperaturas permitieron concluir en tiempo y forma las labores de trilla de este cereal en el territorio pampeano”. En su último informe (9 de enero) dio cuenta que “los valores de rinde son muy dispares, ubicándose entre 8 y 30 qq/ha, según las zonas. Pero aseguró que la calidad de los granos está dando muy buenos valores de peso hectolítrico y proteína, además estima que el área sembrada alcanzó las 286.400 hectáreas”.

 

Favorecida por una condición hídrica no tan ajustada, la siembra si bien no se desarrolló con normalidad incluso por debajo de los valores históricos, resultó exitosa a pesar de la sequía del otoño. Frente a ese escenario, se logró recuperar más superficie en sectores del centro y norte que durante el ciclo 2023/24 los productores no habían podido concretar sus planes de siembra como consecuencia del déficit hídrico que los atravesó durante la ventana de siembra de la campaña pasada.

 

Aquí la mayor concentración para la cosecha de trigo se da entre los días 10 y 30 de diciembre, más allá que en el norte (departamentos de Maracó y Chapaleufú) la trilla se realiza a mediados de noviembre en adelante, en contraste con la zona sur que se levanta durante la segunda quincena de diciembre. Esta diferencia temporal de recolección en favor de la zona norte (37 días) se da por factores climáticos (más calor e mejores isobaras en el norte) y la amplitud horaria. En enero y febrero los valores esperados para las exportaciones argentinas son lentas y con tendencias a la baja ya que en esta estacionalidad se especula con la baja de precios ante el ingreso de la cosecha que se inicia con el trigo y continua en los meses de abril y mayo con el maíz, sorgo y girasol para culminar tiempo más tarde con la soja.

 

Ventana ajustada.

 

Las precipitaciones del mes de noviembre del orden de los 20 a 50 mm favoreció al cultivo muy ajustadamente en la etapa de floración y llenado de granos, razón por la cual superó las expectativas. Durante su siembra el desarrollo del cultivo no se vio beneficiado por diferentes factores.

 

Heladas durante el crecimiento inicial que fomentaron un mayor desarrollo radicular y macollaje; lluvias muy por debajo al promedio histórico que como se explicó llegaron en la última ventana de tiempo, pero permitió llevar a cabo las labores de refertilización y desde diciembre pasado el clima seco con amplitud térmica hacia etapas de llenado ayudó a minimizar el impacto de enfermedades.

 

En la actual campaña de trigo duro o blando (Triticum) estima la Secretaría de Agricultura unas 15 mil hectáreas más que la cosecha anterior lo que representa una superficie total cercana a las 270 mil hectáreas. Los rindes han oscilados en los más altos en los 2.700 kg/ha con un promedio provincial de 2.105 kg/ha (21 quintales por hectárea). Se destacan los departamentos Guatraché con estimaciones de 160.000 toneladas; Atreuco 120.000; Capital 110.000; Conhello 85.000 y Toay con 80 mil toneladas.

 

El escenario actual marca un fuerte salto tecnológico y un manejo más sustentable del doble cultivo trigo-soja, gracias a la siembra directa. La mayor cantidad de hectáreas sembradas en los últimos años se verificaron en la zona centro-sur pues, en el cuadrángulo noreste, que es dónde hay mejores condiciones agroecológicas, aquel cultivo se desplazó por el avance del girasol y la soja.

 

A nivel mundial se proyecta una crítica relación stock/consumo, que ayudaría a mejorar los deprimidos precios del trigo, aún muy por debajo de los valores históricos, con valores de 200 dólares en el Mercado de Chicago y con tendencia a la baja en los fowards (futuros).

 

Industria farinácea local.

 

El complejo trigo pan aquí está conformado por un conjunto de etapas y agentes que engloban a la producción de semilla, producción primaria, diferentes circuitos de venta interna y externa del grano de trigo, la industria de transformación (molienda), industria de segunda transformación (panaderías, elaboradoras de pasta, de galletitas, otras), los canales de distribución interna mayoristas y minoristas, junto a los canales de exportación de harinas.

 

Hay cinco molinos harineros con cuatro operadores registrados, 3.250 operarios y más de 500 empleos indirectos, con decenas de fletes diarios, a pesar de que La Pampa industrializa menos de la quinta parte de su producción triguera. La calidad necesaria para producir harinas 000 requiere un trigo sano, seco y limpio, con un alto peso hectolitrico, buen rendimiento y de características uniformes a través del tiempo.

 

Los diferentes molinos que se encuentran dentro de la provincia alcanzan a cuatro y ellos están ubicados en Jacinto Arauz (Molisud) con una capacidad de molienda de 43.000 tn/año, Casa Alarcia en la localidad de Macachín con una molienda de 28.800 tn/año; Molino Don Antonio S.A. en Gral. Pico con 24.000 tn/año y finalmente el mayor de todos es el Molino Harinero Cañuelas (ex Cargill) ubicado en la localidad de Realicó con una capacidad de 52.000 tn/año.

 

Si bien la provincia tiene una capacidad de acopio de trigo para 919.680 toneladas, buena parte de ese almacenamiento se los destina a otros cereales y la mayoría sale de la provincia. La realidad indica, que la capacidad de procesamiento de los 5 molineros harineros locales llega a las 730 toneladas diarias, es decir 150.820 toneladas año calendario. De ellas 114.623 ton anuales son para la harina 000 y las 36.200 restantes en subproductos farináceos molturados.

 

Según la Federación Argentina de la Industria Molinera (FAIM) y la Bolsa de Comercio de Rosario (BCR), La Pampa industrializa el 2,38% del total de una molienda nacional de 6,1 millones de toneladas.

 

'
'