Los rodanteros son “una nueva raza de turistas”
(Eduardo Castex / Corresponsal) - Los rodanteros son “una nueva raza de turistas”. Al menos, así se autodefinen algunos, asistentes al II Encuentro de Rodanteros que se está desarrollando en el Complejo Polideportivo Municipal de Eduardo Castex. “Hay 110 participantes de varias provincias y también vinieron desde de Chile”, informó Graciela Sosa, miembro del grupo castense organizador del encuentro.
Los rodanteros atribuyen el crecimiento de esta modalidad turística, al deseo de estar en contacto con la naturaleza, conocer sitios que no resultan de fácil acceso, vincularse con personas de otros lugares y entablar relaciones amistosas. “La calidez del rodantero es
única, porque todos tenemos el mismo objetivo: divertirnos y compartir”, explicó Sosa.
En el predio municipal ubicado en el cruce de las rutas nacional 35 y provincial 102, es posible encontrar parejas bailando cumbia, a pocos metros de otyras que juegan al tejo. Otro grupo rodea a un bombisto interpreta canciones de folclore, acompañado por las palmas de sus “espectadores”.
En el centro del complejo, numerosas mujeres provenientes de distintos sitios comparten una rueda de mates, mientras otro grupo se anticipa para preparar una “cena comunitaria” de la que participarán entre 30 y 40 comensales. Hay comunicadores sociales que “hacen radio” desde los encuentros, entrevistando a viajeros de todo el mundo que encuentran en sus viajes; hay profesionales, jubilados y jóvenes. Muchos participan en este tipo de encuentros y luego regresan a sus hogares, pero otros llevan varios meses fuera de casa. Hay quienes llegan en motorhomes “de última generación”, otros con una casilla y una carpa. Sin embargo, todos coinciden: “somos una nueva raza de turistas”.
Muchas historias.
En un encuentro de rodanteros es posible recolectar innumerables historias. Entre los asistentes encontramos al santarroseño y ex trabajador de LA ARENA, Omar Guillén, acompañado por su esposa. Hace unos años camperizaron totalmente su utilitario, que hoy luce prolijamente todas las comodidades. “La pandemia fue el inicio” recuerdan. “Cuando nos aislaban en el diario, todos se amargaban. Yo me la pasaba consumiendo tutoriales, sacando datos e ideas para armar ésta. Y nos llevó dos años”, recuerda Omar, apoyado sobre su “casa con ruedas”, mientras soistiene el plumero con el cual abaca de dejarla “impecable”.
Araceli Coatti y Julio Pivert llegaron desde Lodge, una comarca andina del Paralelo 42 en Chubut. Julio recordó que “hace unos años” pasó por La Pampa en un Ford A modelo 1929. Ahora participan de los encuentros rodanteros en Argentina y Chile. “Es una forma distinta de vacacionar y disfrutar momentos de esparcimiento: salir a conocer”, aseguran. “Hay personas y familias que salen de vacaciones y se alojan en cabañas u hoteles. Pero los rodanteros disfrutamos de esta manera. Algunos tienen unos motorhome de última generación y otros vehículos más humildes, pero todos disfrutamos de igual manerade. Resulta una forma diferente de vivir, es como andar con la casa a cuestas. Nunca falta el asadito y desde el Río Colorado hacia abajo tampoco falta nunca el whisky porque hace mucho frío”, añade, mientras una sonrisa brillante y pícara ilumina su rostro
Radio Rodantera.
Mónica Aun y Daniel Remonda residen en Santa Clara del Mar, y hacen radio por streaming desde los encuentros rodanteros. Rápidamente anticiparon que el próximo fin de semana estarán en Quemú Quemú. “Hay muchos encuentros en el todo el país. Nosotros vamos a distintos lugares, aunque las distancias son largas y la situación económica incide, porque hacemos todo a pulmón”, explican. Sin embargo, sus transmisiones “llegan a muchos oyentes de todo el mundo: tenemos un promedio de 4.000 oyentes diarios entre martes a sábado”. Es que, además de historias y entrevistas, aportan “mucha información para los rodanteros”.
“Entrevistamos a viajeros de nuestro país y de todo el mundo, quienes nos cuentan sus experiencias. El rodanterismo se expandió mucho durante la pandemia y es una nueva raza de turismo”, aseguran.
Los bisabuelos.
Los marplatenses Estelvio Colombini (87) y Nelida Palozzo (76) se denominan “los bisabuelos viajeros”. Hace 24 años que viajan por las rutas y caminos del país. “Es la mejor forma de estar activos y no parar”, explican. Desde que empezaron, Estelvio armó cinco motorhomes, porque los iba vendiendo hasta que pudo adquirir un utilitario cero kilómetro.
En diálogo con LA ARENA, confesaron que permanecieron “dos meses en el norte argentino, escapando del frío” de “La Feliz”, hasta que regresaron para renovar la licencia de conducir. Después partieron para La Pampa. Desde entonces, Estelvio no oculta su fastidio, porque “ya no me dan licencia para conducir una moto de alta cilindrada”. Ambos son viudos y atravdesaron “momentos muy duros, por los golpes que te da la vida”. Hasta que se conocieron, se casaron legalmente y empezaron a viajar. “Los dos somos bisabuelos: yo tengo dos bisnietos que en cualquier momento me hacen tatarabuelo, porque tienen 18 años y ya andan de novios”, aclaró Estelvio.
Provincia “muy linda”.
Los entrevistados se comunicados en grupos que integran en plataformas digitales y redes sociales. Coincidieron en Eduardo Castex porque “en esta época del año el clima es lindo”, aunque arribaron justo durante las jornadas de fuertes vientos. Muchos de estos rodanteros llevan “varios días” recorriendo la zona y algunos destacaron la belleza de la Reserva Parque Luro y del camping de Ataliva Roca. “Estamos descubriendo La Pampa. Es una provincia muy linda, con pueblos muy prolijos y ordenados”, aseguraron.
“Acá todo es más caro”.
Carlos y Yanina viven en Rancagua, una ciudad situada unos cien kilómetros al sur de Santiago de Chile. Finalmente, este año pudieron estar en el encuentro de Eduardo Castex. El año anterior no pudieron llegar “por problemas mecánicos”. En este viaje integran un grupo de rodanteros conformado por parejas de Comodoro Rivadavia, Río Gallegos, Rawson y otras localidades de la Patagonia Sur.
“Estamos más acostumbrados a participar en encuentros argentinos, que en Chile”, destacaron. “Nunca tuvimos malas experiencias con ustedes. A nosotros el fútbol no nos interesa, y solo somos hinchas de la Selección de Chile, pero aquí jamás tuvimos inconvenientes”, expresaron, en referencia a lamentables episodios recientes entre hinchadas de ambos países.
Eso sí, advirtieron que “acá todo está más caro” que en Chile. “El combustible es mucho más caro, la comida y los repuestos cuesta tres veces más. Por eso hay muchos tours de compras argentinos que van a Chile, donde todos es mucho más barato”, aseguraron.
También reconocieron que muchas rutas argentinas están deterioradas, pero aclararon que sus respuestas no eran críticas ni cuestionamientos sino “un aporte para los gobernantes”. Y contaron que “en febrero fuimos hasta Usuhaia por la ruta nacional 3 y volvimos por la ruta 40. Hay sectores que son un desastre: no hay por dónde pasar. Vinimos con un grupo de chilenos y destruyeron sus equipos”, lamentaron.
.
Artículos relacionados