Se entregó el acusado de violación
Según una fuente judicial, el supuesto abusador brindó su versión de los hechos y habría negado cualquier participación en episodios de abusos sexual. A pesar de eso, quedó detenido y para hoy a las 9 está prevista la audiencia, donde el fiscal Héctor Aberásturi formalizará la acusación por violación en perjuicio de una joven que hoy tiene 18 años, pero que asegura que fue abusada cuando tenía 12.
El caso se conoció cuando la joven, que asegura haber sido abusada en su pubertad, se presentó para denunciar el hecho y ante el temor que sus tres hermanas menores, de 8, 10 y 12 años, también hayan sufrido vejaciones. La víctima señaló a la pareja de su madre como el autor de esos abusos.
Por esa declaración, la fiscalía citó a la madre de las niñas para escuchar su testimonio. En sus palabras, habría ratificado las sospechas sobre los abusos de las niñas. Ante la gravedad de la causa, se dispuso que las pequeñas declaren en Cámara Gesell, ante profesionales. Además, se ordenaron una serie de estudios ginecológicos, que ayer se debían cumplimentar en el Hospital Centeno.
Mientras se completan los estudios y las declaraciones, referidas a las tres hermanas menores, la fiscalía avanzó en la acusación original de la joven de 18 años, que denunció ser víctima de abusos reiterados. Se espera que hoy el fiscal fundamente la imputación y pida la prisión preventiva para el supuesto autor de las vejaciones.
El acusado hace varios años que convive con la mujer, que es madre de las cuatro niñas de una anterior relación. Además, es mamá de un bebé de tres meses cuyo padre es el supuesto abusador.
Maltratos. El caso se suma a otros similares, donde menores de muy corta edad fueron víctimas
de maltratos físicos, psicológicos y abuso sexual, por parte de sus padrastros. Uno de los más aberrantes se conoció en General Pico, se descubrió en noviembre de 2010, cuando tres hermanos de 2, 4 y 6 años fueron hallados encerrados en una habitación de una vivienda, con evidentes signos de haber sido golpeados y desnutridos.
Por ese caso, el juez Carlos Pellegrino había procesado el 2 de diciembre de 2010 a María Laura Ortiz y Juan Ojeda, la madre y el padrastro de los pequeños. En aquel momento y en el caso de mujer, el juez la procesó por abandono de persona agravada y lesiones leves reiteradas calificadas, mientras que al hombre, Juan Ojeda, por lesiones leves reiteradas, abuso sexual simple agravado en perjuicio de la mayor de los tres niños y abandono de persona.
Cuando la causa fue elevada a juicio, se llegó a un acuerdo entre la fiscalía y la defensa. La pareja aceptó su culpabilidad y se les dio tres años de prisión. Pero al cumplir los ocho meses recuperaron la libertad de manera condicional. Se supo esta semana que Ojeda decidió mudarse a la localidad de Trenel, donde vive en una vivienda frente a las vías del ferrocarril. No dejó de llamar la atención que el hombre recibiera una condena similar a la mujer, cuando en realidad él estaba acusado de haber violado a la niña de 6 años.
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