Miércoles 07 de mayo 2025

Mad Max y el legado de George Miller

Redaccion Avances 09/06/2024 - 15.00.hs

En esta nota el autor hablará sobre la saga de Mad Max, creada enteramente por el médico y realizador australiano George Miller.

 

Tomás Villarreal D’Atri *

 

Furiosa se estrenó en los cines de Argentina y del mundo el pasado mes de mayo, siendo uno de los estrenos más anticipados de este 2024. Protagonizada por la actriz Anya Taylor-Joy –muy estimada en nuestra patria por sus raíces argentinas-, Chris Hemsworth y Tom Burke. El motivo del hype es que Furiosa es una precuela de la exitosísima cinta estrenada en 2015, Mad Max: Fury Road. Esta última fue una grata sorpresa que revolucionó al género de acción de este milenio y además muy venerada tanto por el público general como la crítica especializada, tanto así que fue nominada a 10 premios Oscar (sabiendo que la Academia no se lleva bien con el cine de acción y ciencia ficción).

 

Esta nota no tiene la intención de detenerse sobre esta cinta en particular, sino que trataremos sobre la saga de Mad Max, creada enteramente por un señor australiano llamado George Miller, quien, desde 1979, se encargó de desarrollar cinco películas de esta franquicia. 45 años después, Miller se consagra como una leyenda del cine de acción, siendo parte del consumo cinematográfico de varias generaciones, siempre fiel a su estilo tan característico.

 

Los inicios.

 

George Miller nació Brisbane, Queensland, Australia en el año 1945, estudió y se recibió en la carrera de medicina, profesión que ejerció un tiempo, cuya principal tarea era la atención de heridos de urgencias, dato clave para entender su visión de la violencia que luego reflejarían sus películas. En simultáneo con su carrera médica, conoció en un curso de cine a Byron Kennedy, con quien luego producirían algunos cortometrajes y las primeras películas de Mad Max. De hecho, la actual productora Kennedy Miller Mitchell, una de las más importantes de Australia, fue fundada por este dúo en el año 1978. Lamentablemente Kennedy falleció prematuramente en un accidente en 1983, pero Miller decidió mantener su nombre en la productora como forma de homenaje. Fue en el 1979 cuando Miller debutó con su primer film, Mad Max, película con un bajísimo presupuesto, realizada a puro pulmón, y que, tras su éxito, decidió volcarse al 100% en su carrera artística.

 

Ahora, ¿de qué trata Mad Max? Si bien las 4 películas de Mad Max poseen historias muy distintas, hay patrones que se repiten, como su personaje principal llamado Max Rockatansky, interpretado por un joven Mel Gibson en las tres primeras entregas y por Tom Hardy en la cuarta. Esta es una franquicia de acción ambientada en un futuro pos-apocalíptico y distópico, ubicada en el país de origen del director, Australia. Si bien en la primera cinta, dado su bajo presupuesto, no se termina de captar del todo este mundo apocalíptico, desde la segunda en adelante se resalta mucho la escasez de recursos en el mundo, sobre todo de petróleo y agua, lo que deriva en una sociedad sumamente violenta y desigual, que se organiza en distintas comunidades y grupos particulares. El protagonista comienza como policía dedicado al control de las rutas, cuya especialidad es perseguir a delincuentes motorizados que generan disturbios en las calles y atacan a los más vulnerables.

 

Max no es el héroe americano típico, sino que es un especialista en la conducción de automóviles modificados para perseguir y destruir a estos delincuentes, sin tener muchos límites morales. Luego del asesinato de su compañero y amigo, Max decide retirarse para evitar que la pandilla de motoqueros lastime también a su familia, aunque finalmente terminan asesinando a su esposa e hijo. Este es un punto de inflexión para el personaje, quien a partir de este momento se convertirá en un vengador solitario, que vagará de sitio en sitio tratando de sobrevivir en aquel mundo despiadado y cruel, pero, al mismo tiempo, su espíritu de justiciero lo llevará a involucrarse en luchas y cruzadas de los más desfavorecidos de estas tierras llamadas Wasteland, o en español, el yermo.

 

La visión de Miller en la creación de su mundo no está alejada de su contexto, por un lado, como dijimos, su interés por mostrar la violencia de forma explícita en las escenas de acción que ocurren mayoritariamente en la carretera puede estar vinculado a su ejercicio de enfermero en las salas de urgencia, donde veía este tipo de accidentes de forma diaria. Por otro lado, la búsqueda por crear un mundo distópico suponemos que puede estar influido por el clima de la época; en el período de la Guerra Fría, la sociedad vivía con un temor constante a que las armas nucleares acaben destruyendo el planeta. Durante los años de los primeros proyectos cinematográficos del director, Australia se vio envuelta en una situación de escasez de combustibles, dando lugar a saqueos y contrabandos. Todos estos factores que mencionamos seguramente han influido en George Miller para la construcción de su mundo, un mundo que tranquilamente puede volverse realidad en un futuro próximo.

 

Particularmente, lo que más me interesa destacar de la cosmovisión de Miller es la transformación que sufren las personas una vez que están expuestos a un contexto completamente vulnerable, donde el alimento, el agua, el combustible, son escasos y por ende, quienes los controlen van a ejercer una relación de poder sobre los otros. Max no busca cambiar el mundo ni hacer la revolución, él es una víctima de todo esto, pero posee cierta sensibilidad por los más débiles y si puede ayudarlos, así lo hará.

 

Efectos.

 

No quería pasar por alto los aspectos técnicos y visuales que posee esta saga.

 

Miller se ha volcado desde su primera película a los efectos prácticos para las escenas de acción, dándole mucho más realismo y dinamismo a las escenas donde abundan las persecuciones en vehículos extravagantes que generan gran destrucción a su paso. Los personajes también se destacan por sus singulares vestimentas, una mezcla de estilos punk, metalero y motoquero, con accesorios de los más bizarros. Como dato curioso, en la primera entrega, varios de los integrantes de la pandilla de motoqueros eran miembros de una pandilla real y realizaban sus propias escenas de riesgo. Otra curiosidad es que en la tercera entrega la cantante Tina Turner hace de villana, con un personaje de lo más bizarro y divertido.

 

En síntesis, el legado de George Miller como director está más que cubierto con sus queridas películas de Mad Max, que pueden gustar más o menos según los gustos de la audiencia, pero de lo que no queda ninguna duda es que logró crear un universo único, con mucha personalidad y estilo propio, que ha servido de influencia para decenas de películas y series, dejando su huella en la cultura popular. Lamentablemente, a la última entrega, Furiosa, no le está yendo del todo bien en taquilla, por lo que peligra la realización de la próxima Mad Max llamada The Wasteland. Es importante para los que disfrutamos de este tipo de cine, que posee un estilo marcado de autor y que ya no es tan común de encontrar en el mainstream, que las apoyemos yendo a la sala de cine y/o difundiéndolas, para que pueden seguir produciéndose.

 

* Profesor de Historia, UNLPam. Colaborador.

 

'
'