Con sabor a hazaña

El Tricolor estaba perdido en su cancha, pero apareció Javier Benvenuto con un espectacular tanto en tiempo de descuento para decretar el 1-0 y darle el pasaje. En la definición se cruzará con ferro de Alvear.
General Belgrano se clasificó anoche para disputar la final del Torneo Provincial de fútbol, al vencer agónicamente como local a Alvear FBC por 1 a 0, en la revancha de una de las series semifinales. El Tricolor, que en la ida había perdido 2-1, logró el pasaje por la ventaja deportiva que tenía por haber terminado mejor posicionado que su rival en la fase de grupos. En la final jugará contra Ferro de Alvear (ver página 30), sin ventaja para ninguno, por lo que en la semana deberán sortear el orden de localías.
Así, el gol de Javier Benvenuto, a los 48 minutos del segundo tiempo, le dio el pasaje por primera vez en su vida a una final provincial a uno de los grandes de Santa Rosa, que fiel a su historia sacó fuerzas desde lo más profundo de su corazón para lograr el objetivo propuesto.
Esa entrega que lo caracteriza fue una vez más su arma principal, porque a lo largo del partido no encontró los caminos como para hacer una diferencia apostando al buen juego. Y cuando parecía que todo se terminaba con el 0-0 que clasificaba a los alvearenses, el gol llegó para hacer justicia a favor del equipo que más lo buscó: primero apareció el "León" Miguel Urreaga por la derecha para enviar un centro pasado, y allí estaba Benvenuto, que con un remate de primera, de zurda, le cambió el palo al arquero Juan Gómez y clavó la pelota contra el segundo poste, desatando la alegría "tricolor" y provocando un grito que se resonó en toda Villa Alonso.
El resto del partido será rápidamente olvidado. Porque Belgrano propuso desde el comienzo, pero sin ideas, y Alvear FBC solamente se dedicó a tratar de cuidar lo que había conseguido siete días atrás. En ese contexto, el Tricolor fue amplio dominador en el primer tiempo, pero lo traicionaron sus nervios y el apuro por llegar al gol de cualquier manera.
Así, el famoso "a la carga Barracas" fue una constante, y los defensores del Azul no tuvieron demasiados inconvenientes como para despejar todo lo que le tiraban. Las más claras fueron un cabezazo de Urreaga que rebotó en su compañero Casanova, un remate del propio centrodelantero que tapó bien el arquero Gómez y un cabezazo de Zubeldía que se fue al lado de un palo. Para la visita, en tanto, un defectuoso cabezazo de Canciani fue la única aproximación.
En el complemento la historia cambió, pero a favor de Alvear FBC, porque controló mejor en el medio al local y no se arrinconó contra su arco, para lo que fue clave el trabajo de Santiago Valdez para tener la pelota y hacerla circular con tranquilidad.
Belgrano, si estaba ansioso en el primer tiempo, en el segundo fue como un torbellino sin brújula. Los pelotazos continuaron y las únicas llegadas claras las aportó Abraham, con un par de remates en el área visitante. Por eso, el Azul respiraba cada vez mejor, y hasta estuvo cerca de anotar por intermedio de Rosiere o el "Palomo" Gómez.
Pero el fútbol es impredecible, y cuando parecía que la fiesta era de Alvear FBC, terminó siendo de Belgrano y la gran cantidad de gente que fue a alentarlo. Ahora se viene Ferro de Alvear, en una final que promete mucho.