Vecinos de la calle Santa Cruz reclaman en el municipio
Los vecinos de la calle Santa Cruz, entre Stieben y Niñas de Ayohuma ya no saben qué hacer. A los habituales reclamos por pérdidas cloacales y mal estado de la calle, se suman ahora los problemas cloacales en las viviendas; los vecinos cansados, fueron a reclamar a la comisión municipal de Obras y Servicios Públicos.
Posteriormente, LA ARENA se acercó hasta la Zona Oeste Quintas, para comprobar que el estado de la mencionada arteria se encuentra igual que siempre. Las pérdidas cloacales y la falta de mantenimiento permanecen latentes.
Verónica Fernández, la dueña de la casa ubicada en la esquina de Santa Cruz y Posta de Yatasto, está cansada de reclamar. Ayer por la mañana, luego de presentarse a la comisión, Fernández señaló que "estuvimos reclamando en la municipalidad, yo como apoyo del vecino que está a media cuadra, que se le taparon las cloacas".
Agregó que "vinieron un día con el camión desobstructor a destaparlas y al camión le quedó una manguera en el interior de la cañería; fueron cortando el caño y lo cortaron en la vereda de su casa. Eso pasó hace un mes y medio, no es de ahora; la cloaca siguió perdiendo y se desmoronó hasta su vereda", relató la vecina.
¿Solución?
Fernández expresó que "el vecino llamó a la municipalidad, vinieron y taparon todo con piedras y quedaron de venir el lunes (pasado) a la mañana a arreglarlo y sigue esperando. Hoy el vecino no puede ir ni al baño porque no aparecieron más".
La vecina también informó que "otro reclamo que hicimos fue el cuenco, que como se ve, está saturado de agua y aunque lluevan 10 milímetros nos vamos a inundar porque no hay por donde corra el agua", especificó.
Peor.
El "calamitoso" estado de la calle es perfectamente perceptible para aquellos valientes que se animen a transitarla. Santa Cruz, entre Antártida Argentina y Stieben es difícil de cruzar; pero la misma calle, entre Stieben y Niñas de Ayohuma es imposible. La acumulación de agua cloacal es tan notoria, que parecen charcos de una lluvia reciente.
La humedad de las viviendas y los pilares y cercos casi caídos por el avance del líquido elemento, dan cuenta de la permanencia de ese estado latente, sin cambios, ni mejoras.
Fernández detalló que "nunca hubo una solución de fondo y cada vez estamos peor, como se puede apreciar". El gran charco de agua sucia de su esquina, "es el caño cloacal principal roto, que necesita que le ajusten las tuercas a las abrazaderas que le pusieron y todavía estamos esperando".
La vecina indicó que las arterias de los alrededores también son complicadas para circular, y mencionó "Yapeyú, Neuquén o Río Negro, pedimos la máquina para arreglarlas y vino a hacer sólo una cuadra desde Stieben a donde empieza el barrio y siempre quedan ahí, no ingresan más adentro; estamos en una isla donde no podés invitar a un familiar, salir de noche porque es un peligro como están las calles, vienen a arreglarte una pérdida de agua acá a dos casas; le pedimos que arreglaran la del frente, pero nos dijeron que no tenían orden y era solo cruzarse la vereda", lamentó.
Impuestos.
La vecina negó que hasta el momento, se haya intimado a los vecinos por la falta de pago de las tasas municipales, como pasó con los vecinos del barrio Butaló. "Todavía no nos han llegado los impuestos, pero arriban todos los meses, que yo sepa acá en el barrio eso todavía no pasó; pero a nosotros nos cobran hasta el asfalto y como ven, no tenemos ni lo tendremos nunca, al parecer", se lamentó la vecina.
Diálisis.
Finalmente, la vecina relató el calvario que vive el padre del menor que necesita realizarse diálisis varias veces al día y que tiempo atrás, reclamaba por el estado de las calles para que pudiera ingresar la ambulancia a brindar la atención necesaria al menor. Sobre este tema, Fernández relató que "hace quince días atrás tuvieron que trasladar al niño en avión a Buenos Aires, estuvo internado en Terapia y hubo que cambiarle el cateter y hoy en día, no se puede dializar en su casa por las infecciones. Así que tiene que venir la ambulancia cuatro veces por día, llevar al niño y su padre hasta el Faerac a practicarle la diálisis y volverlo a traer", concluyó.
Trabajos por una cañería
En la mañana de ayer, dos operarios municipales conectaban las cañerías de agua potable de la calle a las viviendas, sobre Santa Cruz al 1800. De forma escueta, los trabajadores comentaron que fue necesario realizar nuevamente estas conexiones, por la rotura de la cañería principal.
Exigen respuesta en una comisión
Los vecinos de la calle Santa Cruz asistieron ayer a la comisión de Planeamiento, Obras y Servicios Públicos del Concejo Deliberante donde pidieron una solución para el sistema de cloacas de la zona, un "problema que venimos planteando desde hace años, porque estamos hartos de que no haya una solución", afirmaron.
El primer grupo de personas planteó la acuciante situación que están viviendo desde hace años, agravada notablemente en los últimos meses y en particular reclamaron por Juan Ferreyra, cuya familia quedó sin el servicio de cloacas luego de tareas inconclusas realizadas por la municipalidad. Su casa está ubicada en Santa Cruz 1865 entre Posta de Yatasto y Niñas de Ayohuma del Plan 3000.
En la comisión, contaron cómo es vivir entre olores nauseabundos y recurrentemente afectados por enfermedades e infecciones, como así también la falta de asistencia médica a la que están sometidos, ya que no ingresan ambulancias o taxis a esta calle devenida en una zanja intransitable.
Según contaron los vecinos, el subdirector de Operación y Mantenimiento de la comuna, Hernán Montelongo, se comprometió a continuar con las tareas recién mañana o el viernes, aunque los concejales de la comisión de Obras Públicas indicaron que gestionarán ante la comuna una respuesta inmediata.
Miguel, uno de los vecinos afectados, afirmó que "entendemos el caos general por las lluvias, pero venimos así con el tema de las cloacas de hace 10 años, y el sábado llegamos al límite, rompieron toda la calle y no hay ninguna solución. Estamos viviendo como chanchos. Nadie da una respuesta. Si pudiera, me iría, no se puede vivir más en ese lugar".
Recambio de conexiones
Se concretó la firma del contrato para la obra de recambio de conexiones domiciliarias en la red de distribución de agua potable en el barrio Villa del Busto, malla 19 y colocación de medidores. Se realizarán 545 intervenciones.
El acto de rúbrica se llevó a cabo en la misma sede de la Administración Provincial del Agua (APA) y lo hicieron el administrador de APA, Julio Rojo, y el representante de la empresa BK Construcciones.
El monto de los trabajos asciende a 5.930.518 pesos y la firma cuenta con un plazo de ejecución de 180 días.
Rojo detalló que las tareas comprenden un sector muy importante, "entre las calles Gobernador Duval, Estrada, Asunción del Paraguay y Santiago del Estero; son 545 intervenciones a realizar".
Son trabajos similares a los que se vienen desarrollando, para todos los domicilios comprendidos dentro de ese sector. "Se concreta el recambio de la conexión, se colocan los medidores y la reparación del pavimento", indicó el funcionario.
Lo que se está ejecutando viene a buen ritmo y en buenas condiciones de servicio. "En esta segunda etapa tenemos el mismo objetivo, evitar las pérdidas, ya que implica un 30 por ciento de agua potable que no se aprovecha; esto afecta la napa freática y a los desagües pluviales, sumado al costo y pérdida monetaria", cerró Rojo.
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