Exitoso remate en Jockey Discoteca: “Entregamos un pedazo del corazón”
La subasta pública de los elementos que componían Jockey Discoteca duró diez horas. Hubo compradores locales pero también muchos pedidos desde el interior de la provincia. En unos meses reabrirá para mostrar una nueva versión de la mítica discoteca.
Banquetas, sillas y sillones; cuadros de diversos tamaños, freezers, heladeras mostrador, consolas de sonido, luminarias, matafuegos, innumerables vasos, tazas y jarras, la máquina de espuma, hasta el escenario y un teléfono público que ya era reliquia. Todo. Absolutamente todo lo que contenía Jockey Discoteca se vendió en un remate que comenzó a las 9,30 y culminó pasadas las 19 horas. “Estamos subastando 40 años de historia. Entregamos un pedazo del corazón”, confesaba Juan José “Yeyé” Bèssega, cuando caía la tarde y ya no quedaba casi nadie dentro del emblemático boliche de 9 de Julio 234.
“Solo empieza otra etapa”, aclara enseguida, con una calma que no logra ocultar la emoción que lo embarga. En ese espacio repentinamente vacío surge el recuerdo de aquel pub alternativo que abriera una tarde de 1986 en la planta baja del Jockey Club. Ese que sus propios parroquianos transformaron en boliche bailable. El mismo que diez años después se trasladó una cuadra, al edificio donde alguna vez funcionó el histórico Hotel París, para replicar en su interior el diseño y la atmósfera de origen.
Ese mítico espacio nocturno donde varias generaciones de santarroseños bailaron y asistieron a recitales increíbles, ayer fue escenario de un remate singular, que no es un final sino un nuevo principio: “Solo se viene una remodelación, una modernización necesaria y adecuada a los tiempos que vivimos”, explica Juan José Béssega.
“Reabrimos en unos meses”.
Mientras recorre el salón totalmente desmantelado, explica que su hija arquitecta, “se hará cargo de la obra de remodelación. Instalaremos una pantalla gigante y articularemos un espacio más amplio. Ya no habrá un escenario permanente, sino uno que se ensamblará cada vez que haya un espectáculo. Hay que actualizarse”, añade, aunque aclara que nunca eliminarán ciertas tradiciones. “En unos meses reabriremos. Será una nueva era, acorde a los tiempos actuales, pero igualmente seguiremos coordinando algunas noches de El Combinado, alguna Fiesta Ricotera”, dos programas clásicos y muy convocantes de la discoteca.
El remate estuvo a cargo de los martilleros Simón Garzarón y Emiliano Weigel. Vendieron todos los lotes e incluso “reservaron numerosos artículos para personas del interior de la provincia, que se comunicaron porque estaban interesadas pero no podían asistir”. Así, muchos equipos del viejo boliche seguirán en uso mientras otros elementos mantendrán viva la memoria en algunos hogares de jóvenes de ayer.
Nuevos y tiempos.
Aunque en cuarenta años de dos siglos distintos, diversos hábitos y costumbres de la juventud se han modificado notablemente, los adolescentes siguen conservando su afición por las salidas nocturnas cada fin de semana. “Muchas cosas están cambiando y las nuevas generaciones traen consigo otras problemáticas”, advierte Yeyé. Con cierta tristeza y algo de preocupación reconoce que “el mayor cambio lo estamos notando entre los más chicos, los asistentes del matineé, de entre 13 y 16 años”.
Hace algunos meses decidieron “terminar con las fiestas de la espuma. Vemos cosas que antes no se observaban en chicos de esa edad. Hoy resulta increíble la cantidad de elementos que secuestramos cuando pasan por los detectores de la entrada. Hoy, ésa es la edad más complicada”, lamenta.
Béssega explica que por eso “la remodelación propiciará nuevos espacios y mayor amplitud. Construiremos una nueva infraestructura, habilitaremos bloques de baños nuevos, mejoraremos los sistemas de seguridad. Jockey Discoteca seguirá funcionando como lo hizo durante 40 años, una opción de diversión clásica, adaptada a los nuevos tiempos”.
Artículos relacionados