"Fue todo muy raro, nunca vi algo así"

El robo de dos millones de pesos a una financiera en pleno centro santarroseño durante el fin de semana derivó en una noticia que generó enorme sorpresa y perplejidad porque él o los ladrones cortaron los cables de ocho medidores eléctricos de distintos comercios para desactivar las alarmas y poder robar. “Fue todo muy raro, hasta el domingo no sabíamos que estaba pasando y en 15 años que trabajo acá nunca vi algo así”, aseguró Pablo Capello, gerente del servicio eléctrico de la Cooperativa Popular de Electricidad (CPE).

 

El lunes, cuando se conoció el robo a la financiera Gripp, sobre la calle Hipólito Yrigoyen, desde la CPE emitieron un comunicado de prensa para informar que “respondiendo a reclamos individuales por falta de tensión, el personal de la CPE acudió a ocho comercios ubicados sobre las calles San Martín, Alsina, Avellaneda, Sarmiento, Hilario Lagos, Hipólito Yrigoyen, Coronel Gil y avenida Spinetto”.

 

Según se informó, “se produjeron cortes de los cables con carga (positivos), neutros y antifraudes” y advirtieron que “en uno de los compartimentos se encontró una tijera de podar pegada al cable de carga, debido al cortocircuito que originó”.

 

La metodología delictiva tuvo como objetivo cortar cables, desactivar alamas y poder entrar a los comercios. Finalmente sólo pudieron hacerlo en la financiera, de donde se llevaron dos millones de pesos, según el informe policial.

 

“Las reparaciones fueron realizadas en el momento en que accedió la Guardia de la CPE. Todo fue solucionado en el momento. En un primer momento del domingo había cinco casos denunciados que se sumaron con el correr de las horas hasta alcanzar los ocho. La verdad que en ese momento era todo muy raro, no sabíamos lo que estaba pasando. Y en 15 años que llevo trabajando acá, nunca vi algo así”, reconoció Capello en una entrevista con Radio Noticias (FM 99.5).

 

-¿Los medidores fueron reemplazados?

 

-No, pero si se daña una instalación, por ejemplo, existe el riesgo de incendio.

 

-¿Hay protección en las instalaciones?

 

-Si, actúan aguas arriba pero son más lentas que las térmicas.

 

Robo.

 

La Financiera Gripp (Grupo de Inversores Privados Pampeanos) fue la única víctima del robo perpetrado. "Se llevaron más de dos millones de pesos que teníamos en un cajón. Era una cifra destinada a una operación que debíamos realizar el viernes y, como no se concretó, quedaron guardados en el local", contó Luciano Yorgoban, uno de los responsables de la empresa.

 

La financiera ocupa la planta baja de un edificio ubicado sobre la calle Hipólito Yrigoyen al 300, en cuya planta alta funciona la inmobiliaria de Analía Almeida, y el robo habría sido perpetrado durante la madrugada del domingo.

 

Según la denuncia radicada ante la Seccional Primera, los ladrones "cortaron los cables del medidor de luz, esperaron unos 20 minutos hasta que dejó de sonar la alarma y, tras comprobar que nadie acudía, rompieron la cerradura de la puerta del frente para ingresar y concretaron el robo".