"Hubo negligencia y abandono": el testimonio de una amiga del gendarme muerto en Acha

"Hubo negligencia y abandono de persona", denunció Eugenia Junco, amiga de Franco Giménez, gendarme que falleció el 29 de marzo en General Acha. Estuvo internado en el hospital de la ciudad por hantavirus tras contagiarse de la enfermedad en la zona de Villa Mascardi al formar parte del operativo de seguridad. Su mamá radicó la denuncia contra el Destacamento de Gendarmería y pide justicia por su hijo.

 

Franco Giménez era de Sáenz Peña, Chaco, y se encontraba en General Acha como gendarme del Destacamento 4º de La Pampa. En febrero viajó al sur del país para realizar un operativo, regresó enfermo a la provincia y luego de unos pocos días falleció en el hospital Padre Buodo. Pero las circunstancias de la muerte no dejaron tranquila a su familia ni a su amiga, que lo acompañó los últimos días.

 

Es por ello que el viernes pasado realizaron una marcha en la ciudad para pedir justicia por el joven de 23 años. "Nos falta Franco, ¿qué pasó con Gendarmería?", "Un gendarme menos, una familia sin respuesta", fueron algunos de los carteles con los cuales se presentaron los manifestantes en las calles.

 

Cronología.

 

En diálogo con LA ARENA, Eugenia Junco -amiga del gendarme- relató que Franco "se enfermó, contrajo un virus, nos damos cuenta cuando llegó acá". Explicó que el domingo "tenía fiebre, entró a la guardia a las 19. Me mandó mensajes diciendo que estaba muy mal, le dije que llame a alguien de Sanidad o algún jefe para que lo deje salir e ir al médico. El de Sanidad le colocó un inyectable a las 22.

 

"No sé cómo se maneja Gendarmería, pero un enfermero sin prescripción médica creo que no puede medicar", advirtió y aclaró que "la médica estaba de licencia y lo que correspondía era que lo lleven al hospital". A las 23:30, "Franco me comunicó que lo llevaron a la casa porque no daba más, me dijo que se sentía mal y que se iba a acostar".

 

"A las 8 del otro día (el lunes), me llamó y lo llevé a la guardia. Me atendió una médica que le puso otro inyectable y lo mandó a la casa con reposo de 48 horas por un estado gripal. Siguió sintiéndose mal, lo controlamos en la casa y seguía con fiebre. El martes lo vuelvo a llevar y lo atiende otra médica, le dije que le haga estudios, que no me lo iba a llevar así. Lo dejaron internado, le hicieron una placa que determinó que tenía una neumonía bilateral producida por ese virus, pero todavía no sabían cuál era el virus", desarrolló.

 

En terapia.

 

Junco señaló que ese día llegó al hospital personal de Sanidad "preocupado por un certificado médico para presentar en Gendarmería por su ausencia. Como la médica no lo atendió, se retiró del hospital". De la guardia, Franco pasó a una sala de aislamiento "porque sus pulmones estaban muy comprometidos".

 

Esa noche un compañero de trabajo lo cuidó y a la 1:30 le avisaron a la mujer "que lo pasaban a terapia intensiva y que no fuera porque no iba a poder entrar". El miércoles a las 10, la enfermera le dijo que "estaba bien" y que recién el miércoles fue cuando Gendarmería se acercó al hospital. "No se ocuparon del chico hasta que cayó en terapia", se quejó la amiga.

 

Denuncia.

 

"No sé si se podría haber evitado, pero sí sé que hay negligencia y abandono de persona. El chico falleció a las 19 y no tendría que haber pasado, no les importó", apuntó Junco quien señaló que "no fueron capaz de despedirlo como correspondía" ya que "a la familia le entregaron el cuerpo en un cajón de manzanas".

 

La mujer afirmó que "ellos son responsables de llevar a 50 pibes a un lugar donde comían y descansaban entre ratas, donde hay un virus instalado y nadie dijo nada. Tuvo que haber un Franco para que cambien los equipos y el lugar".

 

La mamá de Franco, Alicia Montenegro, radicó la denuncia por el caso en Derechos Humanos en Chaco y cuando llegó a General Acha, para encabezar la marcha, hizo lo mismo en la comisaría de la ciudad. Luego de la movilización, las mujeres fueron convocadas por el jefe de Gendarmería.

 

"Habían pasado 24 días y no había dado la cara", expresó la amiga y señaló que "solo se excusó, dijo mentiras al mencionar que hubo personas que lo cuidaron. Si Franco no hubiese estado solo, se moría solo. Tenía 23 años, súper sano, no tomaba, no salía, era deportista, todas las cualidades la tenía él y no se merecía morir de esa manera", finalizó.