Un dictamen que sigue postergándose

El plenario de comisiones que está debatiendo el proyecto de la ley de Bases y la comisión de Presupuesto y Hacienda, que estudia el paquete fiscal, entraron en cuarto intermedio hasta el martes o miércoles de la semana que viene, anunció el senador y presidente Provisional del Senado, Bartolomé Abdala (San Luis), quien también confirmó que en las próximas horas el oficialismo le responderá a los senadores que reclamaron modificaciones.

 

“Algunos cambios son similares y otros no tienen nada que ver con al ley. Es necesario que se analicen todos las propuestas”, aclaró Abdala, antes de anticipar que en las próximas horas harán circular un dictamen para que ambos proyectos “vayan tomando forma” mediante la introducción de los cambios propuestos.

 

Abdala intervino sobre el final del plenario de comisiones que trata la Ley Bases y navega en un mar de dudas en cuanto al dictamen que La Libertad Avanza intentó apurar ayer, apalancado en un grupo de senadores aliados, entre ellos, el senador y líder del bloque Cambio Federal, Juan Carlos Romero (Salta).

 

Ni con fórceps.

 

El oficialismo llegó a la Cámara alta con el objetivo de asegurarse las firmas, al menos en disidencia, de aquellos senadores que a lo largo de estas tres semanas plantearon profundas divergencias en algunos capítulos y artículos. Sin embargo, los libertarios dieron un nuevo paso en falso y su planificación quedó enterrada bajo planteos aliados.

 

El martes, el paquete fiscal había sido fuertemente cuestionado por el senador kirchnerista Fernando Salino (San Luis) y por el radical Martín Lousteau (CABA). En este contexto, el gobierno dijo que enviaría varios funcionarios a la comisión de Presupuesto y Hacienda para que respondieran esas dudas. Sin embargo, nadie se presentó.

 

Al reanudarse el debate tras un cuarto intermedio, el senador entrerriano Edgardo Kueider, de Unidad Federal, arremetió contra varios puntos, entre ellos las facultades delegadas que el texto otorgaría al presidente Javier Milei y pidió eliminar la palabra “disolución total o parcial”. De no prosperar esta propuesta, exigió la exclusión de empresas y organismo públicos para que, eventualmente, no puedan ser eliminados: Instituto Nacional de Tecnología Industrial (INTI); Banco nacional de Datos Genéticos; Conadi y Senasa. Además, Kueider solicitó sacar a Aerolíneas Argentinas de las empresas sujetas a privatización.

 

Para defender su postura, el entrerriano aseguró que “no todos los organismos del Estado pueden dar superávit” y pidió apartar el texto administrativo de Ley Bases y el Régimen de Incentivos para Grandes Inversiones (RIGI). De todos modos, no cerró la puerta a un posible apoyo a las modificaciones que podría proponer Lousteau.

 

Cambios radicales.

 

Tras finalizar ese punteo, recogió el guante Víctor Zimmermann, senador radical de Chaco, quien leyó otra extensa lista de cambios promovida por un sector de la UCR propenso a acompañar el dictamen, pero en disidencia. Estos cambios empujaron todavía más contra las cuerdas esa ansiedad del gobierno por firmar los despachos.

 

Zimmermann pidió que el oficialismo garantice el financiamiento de los organismos de ciencia y tecnología bajo el Plan 2030 y objetó, al igual que Kueider, la privatización de Aerolíneas, a lo que sumó el Correo Argentino. No obstante, el chaqueño sostuvo que si estas privatizaciones se concretan, sus eventuales dueños mantengan las rutas deficitarias.

 

Y lo mismo para el Correo Argentino: “es un tema central para los pueblos del interior”, advirtió. En el plano laboral, habló de las cuotas sindicales y pidió que “sean válidas siempre y cuando haya una manifestación manifiesta en contrario”.

 

Los dardos siguieron para el RIGI, sobre lo que recomendó claridad para las competencias provinciales, haciendo hincapié en la necesidad de ajustar artículos que protejan la producción local y la industria nacional para favorecer a la cadena de bienes y servicios: “sería positivo que, a partir de los 10 años, los beneficios empiecen a ser decrecientes”. Y finalmente también tocó el tema previsional: “creemos que la edad de la adhesión debería ser 60 años para las mujeres y 65 los hombres”, concluyó.

 

(NA)