“Una prueba irrefutable”

La abogada de Marcelo Macarrón, ex esposo de Nora Dalmasso, calificó como "irrefutable y contundente" la nueva prueba del ADN conocida recientemente en la causa que investiga el crimen de la mujer asesinada en 2006, en su casa de Río Cuarto. Mariángeles Mussolini, quien también patrocina a los hijos de Nora, Valentina y Facundo Macarrón, sostuvo que "con este resultado se conoce una parte de la verdad porque fialmente conocemos al autor material”, aunque reconociò que “todavía falta saber el cómo y el por qué de todo lo que pasó”.

Mussolini aclaró que además del ADN de Sergio Barzola hallado en el cinto de la bata con la que fue ahorcada Dalmasso, , elemento que utilizado para ahorcar a Dalmasso, sino se encontró una coincidencia de ADN mitocondrial: un "pelo" en la ingle de la víctima. “Nuestra postura es igual que la del fiscal. Esto claramente fue un femicidio, una violación seguida de muerte”, insistió la profesional, quien consideró a Nora Dalmasso como “una víctima de violencia de género”.

Aunque la causa estaría prescripta, la abogada aclaró que “el crimen no puede quedar impune” porque la familia de Nora y la sociedad “necesitan una respuesta de la Justicia” y recordó que el caso Dalmaddo marcó un “antes y después” en cuestiones de violencia de género. “Pondremos todos nuestros esfuerzos para que esta persona sea penada como corresponde”, añadió.

“Indubitable y contundente”.

Asimismo, la letrada consideró que los exámenes de ADN producen una prueba “irrefutable, indubitable y contundente”, y consideró que “cada integrante de nuestra sociedad tiene que estar indignado porque un hombre que cometió un asesinato de este tipo sigue en libertad ya la Justicia no debería permitirlo”.

Sergio Barzola, quien había declarado seis veces durante la investigación y se encuentra en libertad, fue imputado recientemente por abuso sexual seguido de muerte y citado a declarar, aunque rechazó la convocatoria.

Nora Dalmasso fue asesinada durante la tarde del domingo 26 de noviembre de 2006, en su casa del country Villa Golf de Río Cuarto (Córdoba). Su curpo desnudo y sin vida fue encontrado en el dormitorio de su hija y la autopsia demostró que el asesino dejó marcas de sus dedos en el cuello de la víctima, a quien asfixió por compresión manual además de haberla estrangulado con el lazo de su bata.