Alemania goleó a Australia

El seleccionado alemán expuso ayer toda su jerarquía individual y goleó a su par de Australia por 4 a 0, en un encuentro correspondiente a la primera fecha del Grupo D del Mundial de Sudáfrica 2010.
En la primera etapa, Lukas Podolski abrió la cuenta a los 7 minutos y Miroslav Klose aumentó a los 26; mientras que en el segundo tiempo Thomas Müller marcó el tercer gol a los 22 y Cacau decoró el resultado a los 24.
Tres de los cuatro autores de los tantos fueron convertidos por jugadores "extranjeros": Podolski y Klose nacieron en Polonia y Cacau en Brasil.
En tanto, el árbitro del partido, el mexicano Marco Rodríguez expulsó a los 10 minutos del segundo tiempo al atacante australiano Tim Cahill, por juego brusco.
Con este resultado, la Selección alemana encabeza la zona por mejor diferencia de gol (+4) que Ghana, que superó ayer a Serbia 1 a 0 con un tanto de penal de Asamoah Gyan, consiguiendo el primer triunfo africano del torneo. Ambos seleccionados tienen tres unidades.
Alemania presentó un 4-2-3-1, con Bastian Schweinsteiger como uno de los mediocampistas centrales, y dos atacantes, Thomas Müller y Podolski, como volantes externos.
Por su parte, Australia plantó un 4-4-1-1, con Cahill adelantado y Richard García como mediapunta.
Los subcampeones europeos superaron con comodidad a un equipo australiano que arrancó con ímpetu, pero que pronto demostró no tener muchas armas para llevar peligro al área rival.
El conjunto alemán buscó la victoria con un juego colectivo preciso y con velocidad por las bandas, destacándose especialmente el trabajo de los volantes Müller y Mesut Özil, dos de los nuevos talentos de este rejuvenecido plantel.
Igualmente, Australia arrancó con actitud y a los 4 minutos estuvo cerca de abrir el marcador con Richard García. El mediocampista cazó un rebote en el área, pero su disparo de zurda, algo incómodo, fue rechazado con los pies por el arquero Manuel Neuer.
Alemania respondió con un potente remate de Klose, que el arquero Mark Schwarzer rechazó con los puños, y en un segundo disparo del mediocampista Özil el portero despejó a corner, haciendo frente con apuros a la ofensiva alemana.
Ese fue el preludio del gol de apertura, que nació de una perfecta sinfonía. A los 7 minutos, Özil inició una jugada por el centro, con un pase profundo que recibió Müller, quien entregó atrás por la derecha para Podolski, cuyo zurdazo superó a Schwarzer, pese a que el arquero llegó a tocar la pelota, para darle la ventaja al seleccionado dirigido por Joachim Löw.
Australia estaba replegado en el fondo, mientras que los alemanes se veían más cómodos en el césped de Durban.
El segundo tanto alemán se concretó a partir de un saque lateral que recibió Phillip Lahm, quien metió un centro perfecto para Klose, que se anticipó de cabeza para el delirio germano.
Alemania jugaba cada vez más a sus anchas, frente a un contrario que apelaba continuamente a los centros aéreos sin resultado.
De hecho, Özil pudo aumentar la cuenta en el minuto 30, pero el defensor Lucas Neill salvó en la línea del arco. Su compañero Sami Khedira también llevó peligro con un cabezazo, y el propio Özil rozó el gol a los 40, pero su brillante partido no obtuvo premio en el marcador.

Lo liquidó sin problemas.
El segundo tiempo se presentó de la misma forma, con el seleccionado europeo cada vez más compacto y preciso en el juego colectivo, y un conjunto australiano con mucha voluntad pero sin armas técnicas.
En el arranque, los jugadores oceánicos reclamaron penal por una supuesta mano del defensor Peter Mertesacker, que el árbitro mexicano no sancionó.
El seleccionado australiano no aparecía en ataque con profundidad y encima a los 10 minutos Tim Cahill fue expulsado por juego brusco.
Debido al adelantamiento lógico de Australia, que jugaba con uno menos, Alemania aprovechó los espacios libres en tres cuartos e hizo trabajar muchísimo a Schwarzer.
Así, en el segundo cuarto de hora, en un lapso de apenas dos minutos, el conjunto de Löw liquidó el pleito.
Primero, a los 22 minutos, Müller puso el 3 a 0 en un contragolpe que terminó con un remate que pegó en el palo derecho antes de tocar la red.
Poco después, Cacau, que había reemplazado a Klose en la etapa de complemento, cerró la cuenta con un toque preciso luego de un pase de Özil.
De esta manera, Alemania, que el viernes enfrentará a Serbia, debutó con un triunfo inapelable y con un rendimiento que lo confirma, por presente futbolístico más que por historia, en uno de los máximos candidatos a conquistar la Copa del Mundo Sudáfrica 2010. (NA y Télam)