Justicia exige medidas para salvar a Sancor
La emblemática cooperativa SanCor atraviesa su momento más crítico. El Juzgado Civil y Comercial de Rafaela, a cargo del juez Guillermo Adrián Vales, ordenó a la empresa que presente en diez días un “Plan de Crisis” que garantice la continuidad de su actividad y evite una liquidación forzada. El documento debe incluir acuerdos con inversores, mecanismos de financiamiento, estrategias comerciales, reordenamiento de pasivos y, eventualmente, la incorporación de management externo.
La medida fue dispuesta en un contexto de creciente presión sobre la cooperativa: en los últimos días se presentaron dos pedidos de quiebra, uno de ex empleados que habían acordado su retiro voluntario y otro aprobado por el gremio Atilra, que denunció la falta de pago de salarios de abril a agosto, el aguinaldo y deudas laborales que superan los 83.000 millones de pesos, sumando pasivos históricos y recientes.
El magistrado añadió que la viabilidad empresaria debe evaluarse en términos económicos y productivos, y no solamente legales, advirtió la necesidad de “humanizar la crisis” priorizando la continuidad laboral y evitando despidos, y ordenó que el plan sea presentado presencialmnente por consejeros, síndicos y gerentes.
SanCor procesa volúmenes mínimos de leche, mayormente para terceros, y sus propios productos ya no se ven en góndolas. El 90% de sus plantas industriales permanece inactiva, mientras que la planta de Devoto, Córdoba, funciona parcialmente bajo un contrato de producción a fasón con Elcor.
En el último año, la cooperativa perdió más de 500 puestos de trabajo, tras retiros voluntarios, jubilaciones y despidos. Actualmente, los trabajadores reclaman 1.860 créditos laborales preconcursales por 69.000 millones de pesos, y en los últimos cinco meses el pasivo laboral sumó 14.000 millones, sin que la firma respondiera a las más de 2.500 intimaciones de pago cursadas por Atilra.
(Ambito)
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