Lunes 14 de julio 2025

Cuenta regresiva para el generador eólico unidireccional

Redacción 09/08/2012 - 04.42.hs
La instalación y puesta en marcha del Generador Eólico Unidireccional diseñado por el santarroseño Jorge Díaz ya está en la cuenta regresiva. En una semana estará montado en el suroeste de la provincia, cerca de la central hidroeléctrica Los Divisaderos, donde su diseñador estudiará día a día su desempeño mecánico y la potencia que tiene con diferentes tipos de vientos.
Con un evidente -y justificado- entusiasmo, Jorge "Bity" Díaz contó que las partes del aerogenerador ya estás terminadas y listas para cargarlas en un camión que las transporte hasta 25 de Mayo y desde allí hasta Los Divisaderos. La intención de Díaz era hacerlo antes del fin de semana, pero a pedido del director de la EPET1, José Luis Weigandt, previo a su traslado el aerogenerador estará unos días en los talleres donde comenzó a tomar forma. "Me pareció una muy buena idea para que lo vean los chicos que empezaron a armarlo", comentó el inventor, recordando que fueron los estudiantes de ese establecimiento los que soldaron los álabes del rotor, los laterales de la tobera, y prepararon el eje sobre el que gira, con una increíble delicadeza, esa máquina de casi 3 metros de altura.
Una vez que los jóvenes observen cómo quedó el trabajo que ellos empezaron, las tres partes principales serán cargadas en un camión del Ejército Argentino -que gestionó la vicegobernadora Norma Durango- para su traslado al sur de la provincia. Según estimó Díaz, el traslado insumirá una única jornada, y un tiempo similar demandará montarlo, ensamblarlo y dejarlo en funcionamiento.
Las partes a trasladar son la tobera -por donde ingresa el aire y es comprimido para que salga a alta velocidad-, el rotor que girará con ese chorro de aire, y una mesa de hierro de 1,40 metros de altura en la que se apoyarán la tobera y el rotor. Además de ensamblar las partes, Díaz tendrá que asegurarlas para evitar que un viento fuerte -de los que son habituales en la zona- pueda desarreglarlo.
"Yo me voy a instalar en una casa que me ofreció la APE (Administración Provincial de Energía) que está al lado de la central Los Divisaderos", contó Díaz a LA ARENA en el taller de Metalúrgica Badano. "Ya estuve en el lugar y la casita está justo abajo de donde va a estar instalado el aerogenerador", acotó.
Una vez armado encima de la mesa de hierro, el conjunto se elevará a unos 4 metros del suelo. Estará orientado hacia el oeste, que es la dirección predominante de los vientos en la Patagonia argentina, hecho que justifica el carácter de "unidireccional" para este diseño.

Variables.
Díaz planea instalarse en la casa que le cedió la APE "tres o cuatro meses", tiempo en que dedicará pura y exclusivamente a monitorear las variables mecánicas y aerodinámicas de su criatura. Lo que más le interesa determinar es cómo influyen en el desempeño del rotor las dos partes móviles de la tobera: la ventana de alivio y la compuerta rebatible. La ventana de alivio se encuentra en la parte superior de la tobera, mientras que la compuerta rebatible se levanta para cerrar el flujo de aire. Por ahora, ambas se accionan en forma manual pero en una etapa posterior, serán abiertas o cerradas en forma automática por motores controlados por sensores.
La función de la tobera es concentrar el aire en una pequeña sección, donde la columna de aire sale expedida a una velocidad 10 veces superior a la que ingresó. La boca de entrada tiene 2 metros de altura por 2 de ancho; la de salida, 0,50 por 1,00. "Si tengo un viento de 20 kilómetros por hora, va a salir a 200 kilómetros, que es lo que yo necesito. Pero si tengo un viento más fuerte, tengo que ver cómo lo manejo porque me puede romper el equipo y descalzarlo", explicó Díaz.
Para medir la fuerza que generará el rotor, Díaz colocará sobre el eje de rotación un freno magnético que le enviará Sergio Vasicek, un amigo y ferviente colaborador del proyecto. Este freno será el instrumento que, por ahora, le servirá a Díaz para determinar el torque que genera el rotor para cada velocidad de viento. Ese parámetro es el que determinará cuánta energía puede producir.
Para una futura etapa, Díaz tiene otra promesa que lo entusiasma: el envío desde Estados Unidos de un "convertidor de torque magnético" que le servirá para triplicar la potencia del equipo. Un modelo de computadora arrojó una potencia de 60 KVA. "Es un número buenísimo -sostuvo el santarroseño-, pero siempre las computadoras tiran un poco más de lo que es en la realidad".

 

Metalúrgica.
Hasta ayer, las partes del Generador Eólico Unidireccional se encontraban en el taller de Metalúrgica Badano, sobre la calle Ferrando, donde trabaja Sebastián Badano, que fue alumno de "Bity" de Díaz en la EPET1. El joven se sumó con todo entusiasmo al proyecto cuando Díaz lo invitó a colaborar aportando el espacio físico, las horas de trabajo y algo de materia prima para terminar de armar la tobera y el rotor.
Entre hoy y mañana, esas partes emprenderán viaje a la Escuela Técnica y después, rumbo al suroeste pampeano.

 

Rumbo a San Julián
Si todo se desarrolla de acuerdo a lo previsto, el próximo destino del invento pampeano será la localidad santacruceña de Puerto San Julián, a casi 2.000 kilómetros de Santa Rosa. Meses atrás, las autoridades municipales se enteraron del proyecto de Díaz por las páginas de internet y se contactaron con él para ofrecerle hacer en esa zona -por demás ventosa- las pruebas de campo. "Mi idea es armarlo allá pero conectado a un generador. Ahí si vamos a ver cuál es la potencia de trabajo", se entusiasmó Díaz.

 


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