Mubarak no renuncia pero cede poderes
El presidente egipcio, Hosni Mubarak, anunció ayer en un discurso televisivo que permanecerá en su cargo hasta las elecciones de septiembre próximo, aunque indicó que transferirá algunos poderes al vicepresidente Omar Suleiman, el primero en ocupar el cargo en el régimen que lleva 30 años. El discurso de Mubarak fue seguido por cientos de miles de personas en la plaza Tajrir de El Cairo, quienes gritaban "que se vaya", en una jornada en la cual circularon versiones de que el mandatario renunciaría al cargo.
Discurso.
"Les hablo desde lo más profundo de mi corazón y estoy muy orgullosos de ustedes", dijo Mubarak en referencia a los miles de jóvenes y agregó: "Estoy escuchando sus reclamos". El mandatario egipcio pidió perdón a las familias de los más de 300 muertos desde que iniciaron las protestas, aseguró que no dudará "en castigar a los responsables de la violencia" y afirmó que "la sangre de los muertos por la violencia no será en vano".
"He delegado parte del poder al vicepresidente, los poderes del presidente de acuerdo a la Constitución", dijo Mubarak. En medio de gritos de protestas en la plaza Tajrir, Mubarak prometió "una transición pacífica hasta septiembre". Mientras, los manifestantes mostraban sus zapatos en señal de protesta. "No voy a aceptar ser sujeto de la presión extranjera", afirmó Mubarak, en clara alusión a Estados Unidos, cuyo presidente, Barack Obama, dijo ayer "estamos siendo testigos de la historia, de las transformación en Egipto y la gente exige el cambio".
El presidente egipcio reiteró que "no voy a participar en las elecciones, cumpliré con las responsabilidades de proteger la Constitución y el pueblo hasta la transferencia de poder, en forma pacífica" luego de las elecciones de septiembre. Además dijo que encomendó modificar seis artículos de la Constitución. "Estoy decidido a cumplir todas las promesas", señaló, al tiempo que aseguró que "ha comenzado un diálogo nacional, debemos seguir ese camino".
En ese sentido, explicó que se avanzará en eliminar la ley de Emergencia, vigente desde 1981 y uno de los principales reclamos de la oposición, "en el momento en el cual se reanude la estabilidad". Mubarak llamó a "restablecer la confianza entre los egipcios, en la economía", tras admitir que la situación nacional es "difícil" y "no podemos permitir que esto continúe porque daña día a día la imagen del país".
Suleiman.
Tras el discurso de Mubarak, el vicepresidente egipcio dijo en otro discurso televisivo que está comprometido a garantizar una "transición pacífica" y ratificó la continuidad del "diálogo político". Al igual que Mubarak, el hasta ahora Jefe de los Servicios de Inteligencia, se refirió a los jóvenes y habló de "revolución de los jóvenes", a quienes instó a "volver a sus casas, a sus trabajos, el país los necesita". "No escuchen a la televisión por satélite que no tiene ningún otro objetivo que propagar el caos, escuchen a sus conciencias y el sentido común", pidió Suleimán, abonando la teoría gubernamental de la supuesta infiltración de extranjeros.
Varios cientos de miles de personas siguieron atentamente el discurso de Mubarak en la plaza de la liberación, tras lo cual gritaron "Mubarak fuera" y "Nada a Omar Suleiman", lanzando los zapatos al aire zapatos en señal de repudio. Al pedido de Suleiman, miles contestaron "Omar, andate. Nosotros no nos vamos". "Somos más de tres millones hoy acá", afirmó Yasser, de 37 años, escritor que trabaja en publicidad. "Desde esta noche se unieron a nosotros todos los escépticos que todavía no creían en la eficacia de nuestra protesta", agregó.
La oposición prevé para hoy en la plaza central una nueva manifestación masiva, llamada "de los millones de personas" o "de los mártires", en homenaje a las personas muertas en las protestas, 302 según estimaciones de Human Rights Watch. (AFP)
El Baradei pidió al Ejército
El opositor egipcio y premio Nobel de la Paz, Mohamed El Baradei, instó ayer al ejército a "salvar" a Egipto, que está a punto de "explotar", tras anunciar Hosni Mubarak su permanencia en la presidencia. "Egipto va a explotar. El ejército tiene que salvar al país ahora mismo", escribió El Baradei en Twitter poco después de que Mubarak delegara poderes al vicepresidente Omar Suleimán, pero sin dejar la presidencia. Entrevistado por CNN, El Baradei denunció "un engaño a gran escala" por parte del presidente egipcio. "La gente está estupefacta aquí. La gente está muy enfadada. Y mi mayor temor es que esto degenere en violencia", declaró desde El Cairo. Acusó a Mubarak de poner en peligro el futuro del país "por la única razón de que quiere mantenerse en el poder". "Resulta humillante para un presidente carecer de poder, pero a pesar de todo quiere seguir siendo presidente. Es una situación asombrosa", observó. El ex director general de la Agencia Internacional de Energía Atómica y Premio Nobel de la Paz estimó que los egipcios no aceptarán "en ningún caso a Mubarak ni a su vicepresidente". "Suleimán es sólo una prolongación de Mubarak. Son gemelos. Ninguno de los dos es aceptable para el pueblo", insistió. El opositor evocó asimismo una "fisura evidente" ejército y poder."Insto al Ejército a salvar el país, para impedir que parta a la deriva", dijo. Baradei propugnó que Mubarak dejara paso a un consejo de tres personas y a un gobierno de unión nacional, en entrevistas a publicaciones de Estados Unidos y Austria.
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