"Me da bronca que la música sureña nunca haya estado de moda"
El autor y compositor argentino presentó el domingo a la noche en el Teatro Español su último trabajo discográfico, "Runa" ("Hombre", en quechua), que registra el concierto acústico e intimista de guitarra y voz en La Peña del Colorado (Buenos Aires), un formato que faltaba en su extensa discografía. Antes, en las instalaciones del Crear, el artista brindó una clínica sobre Chacarera en la que repasó los orígenes africanos de ese ritmo y la manera en que se relacionan el bombo y la guitarra, entre otros aspectos.
Carnota estuvo ese día en Radio Noticias y dialogó con Guito Gaich en el programa La Mañana del Domingo. Allí explicó algunos detalles de su última obra que recorre una gran variedad de géneros folclóricos (milonga, huella, chacarera, huayno, canción, gato, zamba, vidala, milongón, candombe) e incluye un DVD registrado en La Trastienda (Buenos Aires) con una reseña de sus grupos ("Sólo los Martes", "Reciclón", "Entre la Ciudad y el Campo") e invitados especiales (Juan Quintero, Daniel Maza y Orozco Barrientos).
Recién llegado de General Pico, luego de actuar el sábado a la noche en Médano, Carnota dijo que Runa fue grabado en vivo y por tanto no tiene retoques, más allá de la remasterización. "Uno tiene que olvidarse que está grabando. En cambio, cuando uno graba en estudio, tiene que inventar de alguna manera el clima, ante la ausencia del público. Se puede repetir montones de veces, corregir, y más con las técnicas digitales", explicó.
En tono risueño, el músico renegó un poco de las nuevas tecnologías aplicadas a las grabaciones de estudio. "Hacen posible incluso que canten modelos, que canten cocineros... Hay gente que no pega una nota pero hay un programa que corrige todas las notas y hasta los fraseos. Es como si hubieran cantado perfecto", dice y se ríe.
-¿Seguís usando esa pedalera de efectos que tenías cuando tocaste en el Aula Magna?
-No. Ya no la uso más. Cada vez viajo más liviano. Tampoco llevo equipo, ahora traigo la guitarra sola. Tuve una época muy eléctrica en 1987, en los noventa, por ahí.
Carnota contó que está componiendo y también cantando. Prácticamente no hay fin de semana en que no esté brindando algún recital.
En cuanto a los talleres y clínicas de música que incluyen en sus visitas a distintos puntos del país, el compositor explicó que realiza una línea histórica para que quienes asistan adviertan que los ritmos como la chacarera no salen de la nada, ni nacen de un repollo. "Vienen por orígenes y por mezclas, como toda la música americana", afirma. Sus clases incluyen una clasificación de las chacareras, las guías para componerlas y el estudio de la morfología.
Entusiasmado con la charla, Carnota recuerda que el rasguido es una técnica, una forma de tratar la guitarra y destaca el de Los Manseros Santiagueños como uno de los más importantes. "Los Manseros son lo que queda de cierto momento de la música santiagueña y, como ellos no les interesan mucho las modas, se dan el lujo de, por ejemplo, en una presentación, cantar vidalas, que es uno de los ritmos más fuertes de Santiago del Estero, pero sin la prensa que tienen las chacareras, los escondidos y los gatos, que son más divertidos", explica.
Dinero.
Carnota asegura que el dinero se lo gana en las actuaciones. Respecto a Sadaic, afirma que es imposible juzgar si le ha pagado bien o mal sus derechos de autor. "Hay varias vertientes. La música funcional, la de televisión y después todos los discos que uno ha grabado y que se siguen vendiendo y se siguen moviendo y los temas míos que cantan otros intérpretes. Yo no tengo problemas con Sadaic y calculo que me pagan lo que me tienen que pagar. No me calienta mucho (sic)", dice.
A su juicio, las leyes sobre derecho de autor de Argentina están entre las más adelantadas del mundo y han posibilitado la creación de organismos como la Sociedad Argentina de Autores y Compositores (Sadaic), la Asociación Argentina de Intérpretes (AADI) y la Cámara Argentina de Productores de Fonogramas y Videogramas (Capif). "En ningún otro país de los que he conocido hay tres formas de recaudar los derechos autorales, de los intérpretes y de los productores", remarca.
-¿Te gusta la música pampeana?
-Lo que ustedes hacen está integrado también con la música del campo de Buenos Aires. Yo arranco el recital con una milonga, una vidalita y una huella. A veces "Memoria adentro" y otras "Artesano del silencio". En realidad me da bronca que la música sureña nunca haya estado de moda. En una época, hace treinta años, estaban de moda los salteños, después pasó eso y aparecieron los correntinos, todo era chamamé, y después invadieron todo los santiagueños. Pero nunca, por ejemplo, intérpretes maravillosos como Omar Moreno Palacios, que realmente es la estirpe del cantor surero, un tipo muy conocedor del campo, que cría caballos incluso, y sabe muy bien de lo que habla. Además tiene una forma endiablada de tocar la guitarra.
Artículos relacionados