Pampa Natural: crece la incertidumbre
(General Pico) - El futuro del frigorífico Pampa Natural sigue en duda y sus empleados con más bronca. Tras la reunión de ayer en la delegación de Relaciones Laborales quedaron en evidencia las dificultades que tienen los empresarios para garantizar el funcionamiento de la planta. El encuentro se extendió por casi dos horas, con la mediación del delegado local, David Diván. Los directivos Martín y Raúl Fossatti, junto a la doctora Susana Gemignani expusieron los inconvenientes del establecimiento, las causas de la caída de la producción y la propuesta de continuidad. Los trabajadores estuvieron representados por los delegados Ismael Pereira y Mariano Steffanelli, junto a un integrante del Sindicato de la Carne.
Los empresarios propusieron en la reunión el despido de 40 trabajadores, cuyo listado ya está en poder de las autoridades. Además, una reducción de la jornada laboral del 50 por ciento para el resto de los empleados. Con relación al sueldo de junio que le deben a casi 140 personas, el pago se realizaría en dos cuotas: la primera se depositaría esta semana y la segunda antes de fin de mes. En la propuesta empresarial se dejó en claro que el aguinaldo se pagaría en agosto. En el esquema falta fijar de qué manera se abonará las indemnizaciones de las personas que fueron despedidas en enero, febrero y mayo.
Incertidumbre.
A pesar del ajuste la continuidad laboral está en duda, aunque los directivos se esforzaron en afirmar que desean seguir adelante con el emprendimiento. La reunión de ayer dejó una sensación de incertidumbre. Los representantes de los obreros se marcharon preocupados. No sólo por la cantidad de cesanteados que se proponen, el horizonte asoma turbio. Los números sobre la cantidad de faena realizada en los últimos meses, son irrisorios en comparación con las proyecciones que se habían planteado en el inicio de la actividad.
Al finalizar el cónclave, Martín y Raúl Fossatti plasmaron el escenario económico y de producción del frigorífico. Atribuyeron a las políticas implementadas por el gobierno nacional, las dificultades para que la planta pueda exportar carne. "Nosotros invertimos mucho dinero en este proyecto, no para lidiar con conflictos, sino para trabajar y dar trabajo", afirmó Fossatti.
Los empresarios admitieron que no tienen usuarios y que desde la habilitación de la planta una serie de gestiones, frenaron la operatividad. Entre ellas se mencionó que el frigorífico estuvo ocho meses sin matrícula, hasta que finalmente le fue otorgada.
En venta.
También, los directivos expusieron con crudeza la situación de tirantez entre los socios, algunos de ellos productores ganaderos y otros vinculados al negocio de la carne. Los Fossatti dejaron en claro que el frigorífico está en venta y que buscan nuevas alianzas económicas para poder reflotar la planta. Quedó expuesto, además, que hay personas que ya no podrán más dinero para sostener la iniciativa.
Martín Fossatti, uno de los más entusiasmados con el frigorífico, el día que fue inaugurado en diciembre de 2007, dijo que existe un "fuerte desgaste" en el manejo del establecimiento. "Nunca imaginamos un escenario como este, cuando iniciamos las conversaciones en 2005". Aunque no lo mencionaron de manera explícita, los empresarios dejaron trascender que la actual administración provincial no pareció prestarle mayor atención a los reclamos de los directivos. Se mencionó algún contacto con el ministro de la Producción, Abelardo Ferrán, pero nada más.
Para el delegado de Relaciones Laborales, David Diván, el aspecto positivo del encuentro fue poder realizar la audiencia entre las partes, para iniciar la negociación. A partir de ese punto todo lo demás es preocupación. Diván confirmó que los empresarios explicaron las causas de la caída de la producción y detallaron cómo podrían pagar los salarios que adeudan y las indemnizaciones pendientes.
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